Amantine-Aurore-Lucile Dupin nació el 1 de julio de 1804 en París. Su padre, Maurice Dupin, era nieto de un general del ejército francés y su madre, Sophie-Victoire Delaborde, era una campesina. Pero fue su abuela materna la que se hizo cargo de su educación los primeros años, en un bucólico pueblecito francés llamado Nohant que sería un referente a lo largo de toda su vida y fuente de inspiración en parte de su obra.
Después de pasar un breve período de tiempo en un convento de París, en 1822, cuando era una joven de dieciocho años, se casó con el barón Casimir Dudevant, con quien tuvo dos hijos, Maurice y Solange. El matrimonio no llegó a la década de vida y en 1831 la baronesa se instalaba en París donde empezaría una nueva vida. No sería hasta cinco años después que conseguiría oficialmente el divorcio.El mismo año en el que dejó al barón Dudevant, Amantine inició un romance con el escritor Jules Sandeau. Una relación de la que salió una novela escrita conjuntamente, Rojo y Blanco, y el pseudónimo con el que firmaría toda su amplia obra literaria.
Ferviente defensora de la Tercera República, George Sand participó activamente con sus escritos en la Revolución de 1848. Poco tiempo después decidía retirarse a Nohant, donde permanecería el resto de sus días y donde continuó manteniendo amistades epistolares y otras de carácter más íntimos con grandes hombres de su tiempo.
Mujer de carácter, escritora prolija, George Sand se ganó palabras de alabanza de muchos escritores de su época, entre ellos Gustave Flaubert o Alejandro Dumas, mientras que otros, como Charles Baudelaire no soportaron sus aires masculinos y la libertad con la que se movía en los círculos intelectuales de su tiempo.
George Sand falleció el 8 de junio de 1876 rodeada de muchos de los hombres que la amaron y, por encima de todo, respetaron. De ella nos ha quedado una ingente producción literaria.
Películas que hablan de ella