La esperanza mantiene

Por Cytesa01
Podría parecer poco original usar como título un refrán tan conocido como ese, pero el mismo encierra tanta sabiduría que no hay ninguna razón para que no sea utilizado y ver la riqueza y enseñanza que nos deja.
Hay una frase muy hermosa y llena de sabiduría del escritor italiano, Giovanni Papini que dice: Todo ser humano vive por lo que espera.
Esa es otra forma no refranera de decir lo mismo, veamos porque la esperanza mantiene:
1. El que pide amor, espera ser correspondido2. El que pide trabajo, espera conseguirlo3. El que no tiene salud, espera recuperarla4. El que inicia una carrera universitaria, espera graduarse5. El que hace una inversión, espera tener ganacias
Así podríamos confeccionar una lista interminable de cosas que necesitamos en la vida y que todas ellas descansan en la esperanza.Tener esperanza nos energiza, nos da la motivación necesaria para seguir adelante con los proyectos emprendidos, en definitiva no hay ningún logro importante en la vida que sea alcanzado sin una carga de esperanza puesta en él.

Todo el que tiene hijos también tiene la esperanza de que sean personas de bien, que sean correctas y que vivan de acuerdo con los principios básicos que norman la sana convivencia y el bienestar colectivo, he ahí una carga de esperanza para una mejor sociedad.Frente a un problema de salud, hacemos dos encomiendas, primero ponemos nuestra esperanza en el Ser Supremo y luego le pedimos  a ese Ser que todo lo puede para que ilumine al médico y encuentre el camino para solucionar nuestro problema. Ahí está la esperanza, por eso nos mantenmos a base de esperar, por un lado de nosotros mismos y por otro de los demás.Las doce uvas el 31 de diciembre son un vivo ejemplo de esperanza, para alcanzar algo, cosas pendientes de realizar, que en la mayoría de los casos dependen de nosotros, pero todo aquello que depende de nuestra voluntad se hace más difícil de alcanzar que aquello que depende de otros, para poner la esperanza en nosotros hay que doblegar ese poder interior que muchas veces se opone a que alcancemos metas y el principal matador de esperanza está en nuestro interior, no proviene del  vecino, el amigo o del familiar.

Hay un principio socrático que dice: Es un acto de valor vencer un ejército, pero más valor tiene el que se ha vencido así mismo para alcanzar lo que buscaba.  Siembra esperanza en tu vida para que te mantengas cargado de energía y enfocado en tus metas u objetivos.