Kate Bowler, la autora más vendida del New York Times por “Todo sucede por una razón” y “Otras mentiras que he amado”, nos ofrece una mirada fascinante al mundo de las mujeres cristianas en “La esposa del predicador” (The Preacher’s Wife) el precario poder de las mujeres evangélicas famosas.
La historia nos sitúa en la década de 1970, cuando una nueva e importante figura aparece en el escenario central del evangelismo estadounidense: la esposa del predicador famoso. Aunque la mayoría de las tradiciones evangélicas excluyen a las mujeres del ministerio, muchas de ellas han ganado posiciones no oficiales de poder en los imperios espirituales de sus esposos o en sus propios ministerios. Las estrellas más rutilantes, como Beth Moore, Joyce Meyer y Victoria Osteen, escriben libros que se convierten en bestsellers, tienen los números más altos de audiencia en la televisión cristiana e incluso predican.
En “La esposa del predicador”, Bowler, quien también es una aclamada historiadora religiosa, ofrece un retrato comprensivo y revelador de las mujeres famosas de las llamadas mega iglesias, mostrando cómo deben equilibrar las demandas culturales por las celebridades y las religiones conservadoras dominadas por los hombres.
Ya sea que estén solas o al lado de sus esposos, las principales mujeres de los mega ministerios desempeñan muchas funciones: son predicadoras, amas de casa, talentosas, consejeras, contadoras y bellas. Encasilladas por las altas expectativas de la feminidad cristiana moderna, siguen y de vez en cuando subvierten las reglas visibles e invisibles que gobiernan la vida de las mujeres evangélicas, obteniendo grandes recompensas o incurriendo en severas sanciones. Deben ser bonitas, pero modestas; ejemplares, pero no falsas; vulnerables al pecado, pero no desviadas. Y las esposas de raza negra de los predicadores famosos llevan una carga especial de respetabilidad. Pero a pesar de su influencia y riqueza, a estas mujeres se les niega el símbolo más importante del poder espiritual: el púlpito.
“La esposa del predicador”, es un convincente relato sobre la búsqueda femenina de autoridad espiritual en la era de las celebridades. Una historia de mujeres que a menudo comienzan como la esposa de alguien y terminan convirtiéndose en las pastoras de todos. Es un libro bien escrito, brillantemente investigado y un poco incómodo de leer, ya que Bowler nombra gran parte del confuso terreno que rodea a las líderes cristianas y arroja luz sobre esas partes sombrías.
Lo único que me parece que falta en el libro es el reconocimiento del mundo interior y la motivación de algunas de las mujeres descritas. Por ejemplo, no creo que Beth Moore se propusiera construir un imperio ni convertirse en una celebridad. El tamaño de su ministerio habla más del tamaño de su necesidad por llegar al prójimo que del tamaño de su ambición, y me hubiera gustado ver ese reconocimiento, saber que el ministerio ha crecido debido al sacrificio personal, a la obediencia y a la fidelidad. En otras palabras, que ha crecido por el favor de Dios. En ausencia de ese espacio que nos permita ver la generosidad de sus motivos, las hace parecer oportunistas.
Habiendo dicho eso, “La esposa del predicador” es una lectura importante, y un hito necesario y útil para mapear el paisaje de las mujeres y el evangelismo actual. Se aprecia y agradece el compromiso y el análisis minucioso y reflexivo de Bowler sobre este tema. Muy recomendable.
Kate Bowler