Según Keith Chuvala, miembro de la United Space Alliance, la migración se ha realizado por la necesidad de disponer de un sistema fiable, estable y que les permitiese tener el control. Para este cambio, los astronautas encargados del sistema fueron entrenados por la Fundación Linux.
La red opsLAN no es la única que utiliza Linux dentro de la EEI, se ha utilizado este sistema operativo también para el manejo del primer “robonauta” que fue enviado a la Estación en 2011. Su nombre es R2 y puede ser manejado tanto por los astronautas como por los controladores de tierra para realizar tareas demasiado peligrosas en microgravedad.
Sin duda esta noticia no habrá sentado nada bien en Microsoft.