Original de: Don Cuco
Hojeando las noticias en la Web me encontré con una nota bastante curiosa. Una chica mexicana del estado de Veracruz, parte de un equipo ganador de un concurso de robótica fue seleccionada por la NASA para participar en el proyecto Marte 2020. Pero rechazó la oportunidad.
Para mi gusto, Marte 2020, es uno de los proyectos más interesantes y ambiciosos, después del Gran Colisionador de Hadrones. En este proyecto se esperan lograr desarrollos útiles para la humanidad en varios ordenes de magnitud a los obtenidos por el Proyecto Apollo que colocó astronautas en la Luna.
La Cultura Latinoamericana del Matrimonio
¡Te está dejando el tren! ¡Estás llegando a vieja y aun no te has casado! ¡Ya con tu edad es para que tuvieras una familia formada y un matrimonio! ¡A los treinta es difícil encontrar hombres solteros! ¡Ponte las pilas a conseguir un novio! Son algunas de las frases más comunes que ejercen una presión social que se escuchan en círculos de amigas, trabajo y familiares.
Esta presión parte de la sociedad, sobre todo del entorno inmediato que es la familia, Es la que en primer lugar deposita una expectativa en la vida de las mujeres. Se les define a qué edad deben casarse y procrear hijos. Esto muchas veces influye en la toma de decisión, lejos de tomar en cuenta qué es lo que desean en realidad para sus vidas.
La Chica de la Historia:
Esmeralda Rodríguez González joven estudiante veracruzana, junto con un grupo de estudiantes, ganó en abril del año 2012 el primer lugar del VEX Robotics World Championship (Torneo Mundial de Robótica), el cual se realizó en Anaheim, Estados Unidos.
Los estudiantes de la carrera de Mantenimiento Industrial de la Universidad Tecnológica de Gutiérrez Zamora —todos ellos de escasos recursos y de comunidades rurales— ganaron por encima de 250 equipos de todo el mundo, por lo que la NASA anunció que invitaría a una joven a sumarse al Proyecto Marte 2020. Esmeralda Rodríguez fue la elegida.
Pero para sorpresa de todos declinó la oferta, ya que se casará en su pueblo natal de Misantla, en la zona norte del estado.
Las Reacciones Oficiales:
Sin embargo, la presidenta del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), Karime Macías de Duarte, lamentó que la joven ganadora del Mundial de Robótica del Instituto Tecnológico de Gutiérrez Zamora haya declinado la invitación laboral por casarse en su natal Misantla.
“Quienes trabajamos día a día por mejorar nuestro entorno desde una perspectiva de género sabemos lo importante y complicado que resulta tener a mujeres en puestos de toma de decisiones, en carreras de ciencias y tecnología, participando activamente en el mercado laboral”, afirmó.
Mi Opinión muy Particular:
Tengo dos hijas, profesionistas ellas, Médico Cirujano, una de ellas, haciendo su residencia en la Cd de México en Oftalmología, ella sacrificando vida personal, consiguió un intercambio para su ultima rotación, en oftalmología precisamente, en Oviedo, España. Mi otra hija es Diseñadora Industrial ejerciendo su carrera en la industria del vidrio. Uno de los sueños de ella siempre ha sido obtener una oportunidad en la industria aeroespacial.
Pienso que si una de ellas hubiese recibido una oportunidad de ese tipo y hubiese tomada esa decisión, la convencería de alguna forma correcta de re evaluarla.
Esmeralda escogió una carrera muy actual y de mucho futuro, la robótica, desgraciadamente es una carrera que en 1 año o dos de obsoletiza. En México ya hay oportunidades pero las mayores y mejores están en el extranjero. Y una oportunidad como la NASA, ya no digo en el proyecto Marte 2020 sino en cualquier área, sería ideal para su desarrollo profesional.
Y entrando a un tema cultural escabroso como es el matrimonio para las mujeres en México. Aún en los estratos económicos altos es primordial que la mujer se case, tenga familia y se dedique en cuerpo y alma a su marido. En muchos casos son costumbres religiosas, en otros casos, simple tradición.
Pero viendo las cosas fríamente y si vemos un escenario negativo en el cual las cosas en el matrimonio no funcionan bien (nunca podemos saber). La frustración y los reproches van a ser tremendos. No sé si todavía sea tiempo para la oportunidad en la NASA pero el camino que hubiese tomado yo en lo personal habría sido tomar la oportunidad, buscar la manera de establecerme legalmente y luego si contraer matrimonio. Esto si el amor del “príncipe azul” era lo suficientemente sólido para esperar un año o dos.
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