El mes de mayo es tradicionalmente bueno para las altas en la Seguridad Social, que, en datos absolutos, aumentaron en 134.660. Un buen dato y el mejor, desde mayo de 2.007. Pero, si se aplican los correctores de desestacionalización (los que tienen que ver con la época del año) el aumento se queda en 5.650 altas más, lo que evidencia que el inicio de las campañas agrícolas y turísticas influyen determinantemente en estos datos y hacen temer las estadísticas del otoño e invierno. Para los expertos, la diferencia registrada en mayo, entre las afiliaciones a la Seguridad Social(134.660) y el paro registrado (descenso de 98.265), demuestra que hay un efecto combinado entre la reducción de la población activa y el efecto desánimo que lleva a muchas personas a no apuntarse en los Servicios Públicos de Empleo o a marcharse a otro país. Desde los sindicatos, se insiste en el dato del fuerte incremento de contratos temporales. En un año, el número de los indefinidos se redujo un 24,2% respecto al mes de mayo del 2.012, que ya fue un año de durísima crisis, cuando estábamos al borde del rescate total por quiebra. Pero, además, según los datos del propio Gobierno, el pasado mes de mayo sólo se hicieron un 7,5% de contratos indefinidos, cuando, en abril, fueron un 8,5% del total y, en mayo de 2.012, un 10,1%. Los recortes en el subsidio de desempleo aprobados por el Gobierno han llevado a que la cobertura por desempleo solo sea del 61,28% frente al 66,54% de hace un año. Cada vez hay más personas sin trabajo que no reciben ningún tipo de subsidio y, de hecho, el colectivo “Economistas frente a la crisis” recuerda que hace tres años, antes de que la Troika impusiera la política de recortes masivos, ocho de cada diez desempleados en España tenían algún tipo de subsidio, con lo que la cobertura ha caído casi 20 puntos.
Pero, volvamos a la euforia del PP, comparándola con su reacción ante los mismos datos en 2009, 2010 y 2011, bajo el gobierno socialista. En mayo de 2009 y, tras 14 meses de aumento continuado del paro, las cifras, por fin, cambiaron de tendencia, lo que para el PP, entonces en la oposición, fue una mala noticia. El portavoz de Economía, Cristóbal Montoro, dijo que la bajada del desempleo no suponía en absoluto un punto de inflexión: “A la salida del verano, estaremos donde estábamos” auguró, anunciando que volvería la tendencia al alza y se seguiría destruyendo empleo. Y, según su teoría de la “estacionalidad”, el paro aumentó. “No puede interpretarse de ninguna manera como un cambio de tendencia –señalaba en mayo del 2011–, habida cuenta de que, desestacionalizado, el dato del mes es un aumenta en 90.000 personas”. En 2010, ocurrió lo mismo. Pese a tratarse de una bajada de más de 88.000 desempleados, la mayor desde 2005, para el PP tampoco fue una buena noticia. Era un “efecto puramente estacional”, en palabras también de Montoso y de la portavoz parlamentaria del PP en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, infravalorando el dato, comparándolo con un “espejismo” e insistiendo en que, en esas fechas, era habitual que el paro bajase. Sáenz de Santamaría subrayó que la cifra, desestacionalizada, era negativa. A pocos meses de las elecciones, volvieron a interpretar lo mismo: no había que dar tregua al enemigo. Lo resumía muy bien en sede parlamentaria: “El paro baja en abril, y bajará en mayo y junio. Es igual que decir que los días son más largos, las temperaturas son más altas y el sol brilla más. Eso se llama estacionalidad”. Claro que, una vez el PP en el gobierno, las cosas no se ven igual. Y ahora el PP usa los mismos argumentos que les afeaba a sus rivales. En este caso, las palabras de la ministra de Empleo, Fátima Báñez, “son claramente positivas” y dan “motivos para la esperanza”.
En España se dan dos datos de paro: uno mensual, que elabora el INEM(Instituto Nacional de Empleo,) en base a la gente que está apuntada a los servicios de prestación de desempleo del Estado; el otro, elaborado trimestralmente, es el conocido como EPA, (Encuesta de Población Activa), que es el que cuenta como estadística de paro en Bruselas. La diferencia entre el número de parados que da la EPA y el número de parados que da el INEM ha evolucionado en los últimos dos años. Según la EPA, en marzo de 2013, teníamos en España 6,2 millones de parados; según el INEM, unos 5 millones. La diferencia entre los parados, según EPA o según INEM, es cada vez más grande. Prácticamente, ha ido creciendo de forma constante en los últimos dos años. La EPA es una encuesta telefónica a 65.000 familias al trimestre, mientras que, en el INEM, no todos los parados están inscritos, la obligatoriedad de la inscripción se limita a los casos en que el desempleado tiene derecho a percibir alguna prestación por desempleo o beneficiarse de las medidas de políticas activas de empleo. Así, hay parados que no tienen derecho a cobrar ningún subsidio o se les han acabado, dejando de estar inscritos en el INEM, aunque, obviamente siguen siendo parados. En el INEM, también se excluyen de la estadística de parados las personas que buscan su primer empleo durante o tras finalizar sus estudios, trabajadores beneficiarios del subsidio agrario o personas apuntadas a cursos de formación de los Servicios Públicos de Empleo o los que solicitan un empleo para un período inferior a tres meses. O las personas que buscan un trabajo con una jornada inferior a veinte horas semanales. Y, en una situación como la actual en España, de crisis y desempleo crónico, hay quien asegura que las cifras del INEM no sirven absolutamente para nada.
Las discrepancias entre los datos del INEM y los de la EPAse deben a importantes diferencias tanto metodológicas como conceptuales y a los distintos colectivos que realizan los cálculos. El paro de la EPA sigue estrictamente criterios internacionales definidos por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) así como la normativa de la Unión Europea (UE). La población parada incluida en la EPA comprende a las personas de entre 16 y 74 años que cumplen simultáneamente los requisitos de no tener empleo por cuenta propia o ajena en la semana anterior a la de la encuesta y está disponible para trabajar en el plazo de las dos semanas siguientes. El paro registrado, sin embargo, no está sujeto a reglas tan estrictas y comprende al conjunto de personas desocupadas que permanecen inscritas en las oficinas públicas de empleo en demanda de trabajo el último día del mes y que no pertenezcan a colectivos excluidos. La EPAes “unainvestigación continuay de periodicidad trimestraldirigida a las familias que viene realizándose desde 1964. Su finalidad principal es obtener datos de la población en relación con el mercado de trabajo: ocupados, activos, parados e inactivos”. El INE (Instituto Nacional de Estadística) es el encargado de llevar a cabo esta encuesta. Los datos que ofrece el Ministerio de Trabajo llegan directamente de los Servicios Públicos de Empleo, antiguo INEM (Instituto Nacional de Empleo) que ofrece dados de los parados inscritos, con nombres y apellidos. Tiene una periodicidad mensual, de ahí que se hable de datos del paro en diciembre, enero, etcétera. Un aspecto a favor de utilizar los datos de la EPA es que éstos son más extensos y completos, porque habla de personas ocupadas y en paro; pero también de personas inactivas (estudiantes, jubilados, amas de casa...). Los datos del INEM, sin embargo, son cifras reales y actualizadasde gente inscrita en sus listas en las distintas provincias.
Mientras el INEM y la EPA lanzan sus cifras de parados, el Gobierno vaticina nuevos cambios y profetiza nuevos tiempos mientras que, con su política de recortes y con la vista fija en el otro lado del túnel, volvemos a los años delfranquismo. Como detalle ilustrativo de lo que decimos, dos son fichajes del Gobierno de Mariano Rajoy para el Tribunal Constitucional, que inicia su nueva andadura con mayoría conservadora: Pedro José González Trevijano, el rector universitario que se opuso a la retirada de los restos de Franco del Valle de los Caídos, y Enrique López, el juez que tiene el récord de intervenciones en jornadas de la Fundación FAES de José María Aznar. Por otra parte, los obispos deciden los contenidos de la asignatura de Religión y los criterios de evaluación aplicados para evaluarla. El anteproyecto de la LOMCE, es aprobado por el Consejo de Ministros y un documento de la Conferencia Episcopal equipara la familia, la parroquia y la escuela como “espacios de evangelización”. La iglesia se ha metido de lleno en la defensa de la asignatura de Religión, considerada como las Matemáticas o la Lengua, que compute para la nota media y la obtención de becas o para repetir curso. La nueva 'ley Wert' establece que sean los obispos los que diseñen los contenidos de la asignatura, que se impartirá en Primaria y Secundaria, además de los criterios que se aplicarán para su evaluación. Además, los obispos piden una formación en principios y valores éticos o morales no sólo dentro sino también “fuera de la asignatura de Religión” de forma que la cultura religiosa católica se integre “en el conjunto de las ciencias humanas”. Y lamentan que, en la sociedad, exista un “menosprecio hacia la enseñanza religiosa frente a los conocimientos científicos y sociales”.
Y he aquí que la Eurocámara otorga a la Plataforma de Afectados por la Hipotecael premio Ciudadano Europeo 2013, junto con la Academia Vasca de la Lengua. El Parlamento Europeo seleccionó a la PAHy a la Real Academiade la Lengua Vasca(Euskaltzaindia), candidatura defendida por la eurodiputada liberal Izaskun Bilbao,junto a otras 41 candidaturas, procedentes de un total de 21 países europeos. El premio será entregado a mediados de octubre en la sede del Parlamento Europeo, en Bruselas. La candidatura fue presentada por los eurodiputados Raül Romeva (Verdes/ALE), Ana Miranda (Verdes/ALE) y Willy Meyer (GUE/NGL). La eurodiputada liberal Izaskun Bilbao (ALDE) defendió la candidatura de Euskaltzaindia para el premio. La portavoz de la PAH, Ada Colau, considera que este premio “debería hacer rectificar al PP”. Colau se muestra “muy agradecida” al Parlamento Europeo por la distinción “que es especialmente importante en un contexto donde el Gobierno del PP no ha querido recoger las demandas de la PAH y ha dado la espalda a la Iniciativa LegislativaPopular”. Ada Colau recuerda que “el PP ha intentado desviar la atención del problema de los desahucios y la vivienda mediante una campaña que desacredita y criminaliza a la PAH, llamándonos nazis y terroristas”. Desde el año 2008, la Eurocámara concede este galardón a personas u organizaciones que luchan por los valores europeos, promueven la integración entre ciudadanos y los Estados miembros y facilitan la cooperación trasnacional dentro de la Unión. Distinciónque reconoce “a personas u organizaciones excepcionales que luchan por los valores europeos, promueven la integración entre ciudadanos y los Estados miembros o facilitan la cooperación transnacional en el seno de la Unión, y a los que, día a día, tratan de promover los valores de la Carta de Derechos Fundamentales de la UE”. Sin embargo, para Carlos Iturgaiz, eurodiputado del Partido Popular, la entrega de este premio a la PAHes un “verdadero escándalo”, un galardón que la delegación del PP en la Eurocámara intentará que se retire. Carlos Iturgaiz deja claro que su partido está “en contra” de la concesión del premio a una “organización violenta”. En la misma línea, la portavoz de la delegación del PP en la Eurocámara explica que pedirá que se “modifique esta decisión”. “Lamentamos que el único español que estaba en el jurado, (el socialista y expresidente del PE, Enrique Barón), no haya tenido la valentía de reconocer que los actos violentos de esta plataforma no se corresponden con los valores de este premio”, indica la delegación española del PP en la Eurocámara quien dice estar de acuerdo con los objetivos, no con los medios” que utiliza la PAH.
Como si de la madrileña Puerta del Sol se tratara, los indignados turcos han hecho de la plaza Taksim su hogar. Mensajes satíricos contra Recep Tayyip Erdogan llenan la biblioteca, el centro de información o las tiendas de campaña. Toda una microcomuna en el centro de Estambul que denuncia y se resiste a las políticas del primer ministro turco. Una semana después del desalojo a la fuerza del parque Gezy, miles de ciudadanos del país siguen manifestando su descontento y exigiendo la dimisión de un Erdogan, al que consideran un autoritario. “Ha hecho dos anuncios: uno, desde el aeropuerto y otro, desde casa. Los dos han sido agresivos. Personalmente –lamenta un manifestante–, esperaba que bajara un poco el tono. Al menos, para calmar las cosas. Pero no lo hizo. Su discurso fue muy duro, carente de sentido político y sin ninguna lógica”. A pesar de las críticas, el primer ministro turco siguió desafiante. Tras su viaje por el Magreb, Erdogan aprovechó una improvisada tribuna en el aeropuerto Atatürk de Estambul para exigir a los manifestantes que cesen inmediatamente unas protestas a las que calificó de ilegales. Erdogan afirmó que no cederá pero que está dispuesto al diálogo.
La plaza Taksim (Estambul), un lugar de gran simbología en el mundo obrero turco, se ha quedado aislada del resto de la ciudad con barricadas de coches destruidos, vallas y adoquines. Allí se encuentra Gezi, el parque que Erdogan pretende destruir, una de las escasas zonas verdes del centro de la ciudad del Bósforo. El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdoga, da a entender que no piensa retroceder en sus planes urbanísticos sobre Estambul, que han originado las masivas protestas en Turquía, y relaciona a los manifestantes con el terrorismo. “Los ciudadanos que tienen una responsabilidad en la protección del medio ambiente tienen que saber que algunas personas que participan en las protestas están condenadas por actos de terrorismo”, fueron sus primeas palabras. La madrugada del pasado viernes, 31 de mayo, la Policía desalojó a quienes protestaban contra una remodelación urbanística que prevé construir un centro comercial en uno de los parques de Estambul, lo que desencadenó unas protestas que se han extendido por todo el país y que han causado tres muertos y 4.000 heridos. Erdogan tachó a los manifestantes de çapulcu –algo así como “merodeadores” o “alborotadores”– y confesó no poder concretar nada “con la gente que provoca incendios”. En una comparecencia ante los medios, hizo referencia a que parte de ellos estaban fichadas por ataques a la embajada estadounidense, en relación al atentado perpetrado el pasado 1 de febrero, en Ankara, por un grupo de extrema izquierda. “Nuestro servicio secreto los conoce”, concluyó Erdogan, dejando claro que no se había planteado dar marcha atrás en su decisión sobre la intervención urbanística en el parque. Para Erdogan “la gente que quiere manifestarse tiene que adaptarse a los lugares concretos para ello y a las necesidades de esos lugares”. Quien sí se tomó en serio a los manifestantes fue Stefan Füle, el comisario europeo de Ampliación y Política de Vecindad, de visita en Estambul. Durante su estancia, se reunió con representantes de la Plataforma de Solidaridad con Taksim. Füle participará también en una conferencia sobre las relaciones UE-Turquía, en la que espera abordar “el futuro a medio plazo de Turquía y reflexionar sobre las lecciones extraídas de los acontecimientos en los últimos días”.
Resistencia en Turquía. El humor de los manifestantes no tiene límites. Un perro lleva un cartel que dice: “Si no encuentro el parque, me cago en el centro comercial”.
“No fue raro –escribe David Trueba en ‘El País’ del pasado jueves, bajo el título ‘Profetas’– que Rajoy anunciara una semana atrás que, según sus previsiones, los datos del paro serían esperanzadores. A los que se asoman a los medios con un higiénico escepticismo, les debió sonar a rito antiguo esa profecía basada en datos que al presidente del Gobierno le llegan con una natural antelación. Eso no impidió que sus asesores de imagen le empujaran a marcarse una de profeta…
“Más allá de esa pose oportunista de profeta –prosigue D. Trueba–, celebremos un avance, aunque sea a pasitos de bebé, en la creación de empleo. La tentación del poder de presentarse como un adivinador cargado de esperanza es hasta tierna. El impulso que toma Rajoy tras esa predicción sería bobo desaprovecharlo. Igual que la posibilidad de que pacte con el partido de la oposición una postura común en la cumbre europea, son detalles que la ciudadanía percibe como una corrección sobre la estúpida cerrazón que capitalizó la legislatura pasada y la actual. Por eso sería bueno que el presidente se asomara a la bola de cristal de una manera sincera, no con los datos precocinados de una oficina de información, sino con la perspectiva de un verdadero estadista. Y que echara un vistazo al país futuro que necesitamos, la educación que precisa la nueva generación, la oferta laboral de calidad, el necesario rigor en sanidad y la ley de costas, la amargura de un ciudadano frito a tasas e impuestos, la manipulación y la invasión sobre las libertades informativas. Todo eso está también en la bola de cristal, se ve con claridad si miras sin prejuicios, y el esfuerzo está en acercarlo un poco, no cegarlo con la ideología, los intereses particulares y el egoísmo de una élite corrupta que quiere quedarse para sí, en tiempos de crisis, con todo lo que es imprescindible para seguir llamándonos Estado y comunidad”.
David Jimenezescribe en su web: “La ministra de Sanidad, Ana Mato, no sabe quién pagó su viaje a Disney… Tanto desorden en las cuentas domésticas de los políticos, esa obsesión por llevárselo gratis, contrasta con la exigencia de que los demás se aprieten el cinturón. El pensionista sí sabe quién paga ahora las medicinas que antes eran gratis, los padres los libros de texto que estaban subvencionados, los estudiantes unas matrículas universitarias abusivas que dejan a miles de ellos fuera del sistema educativo, los discapacitados esas ayudas que muchos han esperado, literalmente, hasta morirse. La estafa que vive España ha llegado a un punto de insoportable miseria moral. Los que más hicieron por provocar la crisis son los que mejor parados están saliendo de ella. No sólo se roba, sino que se hace riéndose en la cara del que no lo hace; no sólo se malgasta el dinero público, sino que se hace a la vez que se pide un mayor esfuerzo al contribuyente; no sólo se castiga al débil, sino que se hace mientras se indulta al poderoso. Estos días se habla mucho de la posibilidad de que los dos grandes partidos, socialistas y populares, lleguen a un acuerdo sobre la crisis. En realidad ese acuerdo ya existe: consiste en mantener intacto el chiringuito de las prebendas, los sillones y los favores que tan bien les ha servido. El otro día leía que España es el país con más bares del mundo, uno por cada centenar de habitantes o así. Uno de esos bares está en el Congreso de los diputados, donde nuestros representantes han pretendido subvencionarse los gin-tonics con dinero público. Nada resume mejor lo que muchos llaman crisis y en realidad es un gran sinpa que permite a la casta política arramplar con la barra y marcharse dejando la cuenta a los demás”.
Con esta viñeta de Erlich, comenzamos la sección de humor de todos los domingos. Le siguen otras del mismo autor.
Seguimos con el humor de esta semana: Faro/D. Da Col, Ibáñez, Forges, J. R. Mora, Peridis, Ferrán Martín, A. López…
Terminamos con cuatro vídeos. En el primero, la portavoz del PP, Sáenz de Santamaría, durante la sesión de control al Gobierno socialista, el 4 de mayo del 2011.
Montoro, en junio del 2009, ya denunciaba el maquillaje en los datos del paro.
La primea semana de resistencia en Estambul.