La Falange

Publicado el 19 mayo 2015 por Alejandropumarino

La fotografía recoge uno de los objetos que el número once de Podemos en la candidatura por Gijón, conservaba como coleccionista de militaria y aviación de todos los países. Refiere que trataba de escribir un libro cuando se descubrió la cantidad de material que conservaba al respecto y del que quien suscribe solo tuvo noticias a través de la prensa local. Fue invitado a presentar su inmedianta dimisión.

Una de las críticas al político emergente fue su proximidad (ideológica, formal o de imagen, uno no acierta a saberlo) a formaciones como la Falange Española, algo que no debe extrañar porque quien suscribe, recuerda la presencia de papeletas de esta formación (u otro nombre similar) en las mesas electorales; tratándose de un partido que se presenta a unas elecciones, admitiremos que entra dentro del juego democrático común a todos ellos, como Bildu, sin ir más lejos.

En segundo lugar, tratándose el nuevo partido de una formación transversal, a nadie debe sorprender que recoja adeptos de las más variopintas y dispersas ideologías políticas. Entiendo que debería acoger con los brazos abiertos a ciudadanos procedentes de otras ideas que pretendan integrarse en el proyecto político de Podemos, defendiendo a la “gente” y alejándose de la “casta”.

Finalmente, tengo la sensación de que el término “Falange” está demonizado por la historia reciente; quiero recordar que resultó fagocitada por el régimen franquista, que precisaba un partido adscrito al mismo y se decantó por uno ya existente. Tirarse de los pelos porque se presente a unas elecciones un partido próximo a la derecha extrema es la hipocresía de quienes aplauden la irrpución de otras formaciones de extrema izquierda que venden el marchamo de la libertad y democracia inexistente en países en los que alcanzaron cuotas de poder.