Desarrollo Personal
Hoy este post será diferente, por ser una fecha especial, hoy hace 27 años llegó una integrante más a mi linda fami
Pasaron los años, yo seguía vistiéndola, jugando con ella, y enseñándole muchas cosas, creció y entró a la escuela, iba a todas sus presentaciones, tal vez se me pasó alguna, pero trataba de estar en todas y siempre animándola, tomando fotos, coleccionando anécdotas, viviendo, disfrutando de esa bendición.
No siempre todo fue color de rosa, alguna vez me olvide de ella en el colegio. ¡Si! ¡En el colegio!, ella apenas tenía 6 años y yo al conversar con mis amigas no recordé revisar que estuviera en el bus y cuando llegamos, me di cuenta, regresé inmediatamente pero ya estaba hecho y ella era un mar de lágrimas. Esta es una entre muchas anécdotas. Ella creció compartiendo mi vida, conociendo a cada persona que entraba en ella y siendo amiga de mis amigos.
De pronto un día me di cuenta que dejó de ser la chiquitina y ahora me iba a dar otra gran alegría, una sobrina, que emoción! Tampoco las cosas fueron fáciles en esta etapa, de hecho fue un momento de mucho aprendizaje para todos. Para mí fue tan importante esa oportunidad para utilizar todo lo que había asimilado hasta esa fecha, todo el conocimiento, la fe, las energías y lo que a mí había llegado, fue un momento de vida o muerte (literal), con paciencia y mucho amor, con el apoyo de mis papás, mi hermano, cuñada y mi esposo también logramos salir adelante todos bien y con una nueva integrante en la familia.
Hay tantas cosas pasadas, y muchas más por vivir, agradezco esa bendición tan grande que es mi familia y por fortalecer mi fe en esos momentos. Quiero dar las gracias a mis padres porque sin ellos, no estaríamos acá, ni seríamos lo que somos.
Hoy en una fecha tan especial, estas palabras van dedicadas a mi nena: