La fiesta en paz

Publicado el 14 enero 2013 por Manuelsegura @manuelsegura

Casi 32 años después, la ya mítica serie de TVE ‘Cuéntame’ nos recrea el 23-F. He visto que en un capítulo, la madre en la serie se planta ante un tanque y su dotación cuando, al parecer, va camino de Valencia a por su hija, a la que el golpe sorprende en la capital del Turia. En todo este tiempo, y casi como hongos, han venido a surgir multitud de presuntos héroes ciudadanos en aquellas horas tan cruciales. Y la verdad es que no fue para tanto, ni mucho menos. Recuerdo todavía muy bien –porque yo estaba en la Región Militar mandada por Milans del Bosch– la imagen de sus calles vacías, desérticas, desnudas, ante la ausencia de esa masa ciudadana que, algunos nos quieren hacer creer, se pudo echar a la calle para hacer frente a los golpistas y defender la democracia. Siento transmitirle a las generaciones actuales que no fue así y que la mayoría de la gente lo que hizo fue quedarse en su casa, a la espera de cómo evolucionaran los acontecimientos. Es más: me temo que si el Rey, en lugar de salir hacia la una de la madrugada en televisión desautorizando a los rebelados, hubiera apoyado la asonada, la legión de adeptos hubiera sido de órdago. Eso, en un país que hizo colas interminables para despedir el cadáver del dictador; el mismo que colmó las calles madrileñas para despedir a personajes antagonistas de Franco como La Pasionaria o Tierno Galván. Ése que era habitado, como en la canción de Jarcha, por ‘gente que sólo desea su pan, su hembra y la fiesta en paz.’