El regreso desde Medio Oriente causó una enorme algarabía en el Parque Independencia. Ignacio Scocco arribó a un Newell’s aquejado por su bajo promedio, pero sus goles colocaron al equipo como único líder del torneo Inicial 2012/13. Una chilena y un cabezazo ante Arsenal bastaron para que Nacho se convierta en la figura del fin de semana y profundice aún más el gran presente rojinegro.
En el opaco y alicaído fútbol argentino, la resurrección leprosa enaltece viejos valores fundamentales de este juego: la pelota, siempre a un compañero. Gerardo Martino ha creado un once netamente identificado con los colores de la institución. La experiencia de Gabriel Heinze y Maximiliano Rodríguez, conjugada con la frescura de algunos jóvenes, han hecho de Newell’s un rival admirable. Ante ese ameno ambiente, Scocco se erige en el responsable de dar el pase a la red y desatar la locura de la mitad de Rosario.
Contra el campeón vigente de estas tierras, Scocco brindó la primera prueba de su voracidad a través de un formidable testazo, imposible de detener para Cristian Campestrini. Una excelente maniobra colectiva y una increíble asistencia de Lucas Bernardi disfrazada de centro allanaron el camino para que el ariete abriera el marcador.
Su segunda intervención resultó aun más espectacular. Como muestra de una jerárquica colección de recursos, el máximo artillero del campeonato usufructuó un rebote con una magnífica chilena y revalidó nuevamente sus credenciales. Ni siquiera el descuento del áspero Arsenal impidió la victoria del cuadro local, cuyos sueños parecen recorrer sin problemas el camino hacia una nueva estrella.
Antecedente cercano:
- Scocco y el otro doblete a River