Quizás el problema más grave que hoy tiene la Física cuántica es la dificultad para explicar sus conceptos de forma comprensible para la gente corriente (como los serranos ). Sus principios escapan a nuestra concepción de la realidad, esa que podemos ver y palpar. La política acude en su ayuda (como hace con otras ciencias) y aporta casos reales que ayudan a comprender sus secretos.
Veamos alguno: según la Física cuántica “la observación de una realidad modifica lo observado, incluso en su pasado, presente ó futuro”.
¿A la Transición (y hechos del pasado), a los casos de corrupción y nepotismo (cuando son descubiertos) y los programas electorales de los partidos (si gobiernan) no les pasa lo mismo, cuando se piden explicaciones?
En Física este principio es independiente del mirón y de lo observado. En política depende del partido y de la situación.
¿A que ahora se entiende mejor… la Física cuántica?
Lar-ami
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