La Glorieta de Ofelia Nieto (2): las pérgolas.

Por Sevilladaily


Junto a la fuente central de la glorieta, Juan Talavera dispuso unas pérgolas con bancos cuyos asientos están recubiertos de azulejos en un azul intenso y en sus columnas añadió otros azulejos artísticos con detalles de la vida y de la obra de Ofelia.

Pero ¿quién fue Ofelia Nieto? Ofelia Nieto, soprano española cuyo nombre completo era María Ofelia Erenia Nieto Iglesias, hija de José y Erundina, nacida en Algete (Madrid) el 18 de marzo de 1898, y fallecida en Madrid el 22 de marzo de 1931.

Antonio Campos, miembro del coro del Teatro Real de Madrid, fue quien descubrió las dotes cantoras de Ofelia que, acto seguido, estudió en el Conservatorio de Madrid.
El 28 de mayo de 1914, debutó en el Teatro Real de Madrid estrenando Maruxa. El éxito alcanzado, la llevó muy pronto a cantar Ernani, Madama Butterfly y La Boheme. A continuación, recorrió España en una gira de recitales junto a su hermana la soprano Ángeles Ottein.
En 1918 estrena la ópera El Avapiés de Conrado del Campo y Ángel Barrios
En octubre de 1919 hace su presentación en el Teatro La Pergola de Florencia, cantando Manon, junto al y Aida.

En 1920, cantó el Mefistófeles de Boito en el Teatro Real de Madrid y el Otello de Verdi. En ese mismo año estrenó en el Coliseo Albia de Bilbao la ópera Amaya de Jesús Guridi.

En 1921, se traslada a Sudamérica, iniciando una gira triunfal que le lleva a cantar en el Teatro Municipal de Río de Janeiro, El trovador de Verdi.  A continuación debuta en el Teatro Abreu de México cantando el Mefistófeles de Boito y la ópera cómica  Mignon. En 1922, en el Teatro Esperanza Iris de México, canta Un baile de máscaras. A continuación se presenta en el Teatro Colón de Buenos Aires, cantando La Dolores. Unos meses más tarde regresa al Teatro Real de Madrid donde canta Aida y Tosca.

En 1926, y con la intervención de Arturo Toscanini, canta en la Scala de Milán, Lohengrin, junto los tenores Aureliano Pertile y Carlo Galeffi; El cazador furtivo, junto al tenor Antoine Trantoul, el bajo Tancredi Pasero y la mezzosoprano Ebe Stignani, dirigidos todos por Gabriele Santini. En 1928, y cuando estaba en la cúspide de su carrera, se retiró de la escena para contraer matrimonio con el sevillano Felipe Cubas, muriendo en Madrid, el 22 de marzo de 1931.

La vinculación de Ofelia Nieto con nuestra ciudad es muy fuerte. Y está estrechamente ligada a la ópera, a la acción social y al amor.  Ofelia Nieto cantará en el Teatro San Fernando prácticamente todas las temporadas hasta su retiro, cuando se casa con un sevillano, Felipe Cubas Albernis. Gracias a la construcción del teatro San Fernando en 1847, la afición lírica sevillana creció de tal forma que Sevilla se convierte en la segunda capital de la ópera europea, tras la hegemónica Londres. Ofelia en Sevilla, en el San Fernando, cantó e interpretó las más sobresalientes óperas: "Aida, Tosca, Travista, Bohéme y, sobre todo, Manon, su preferida.

La relación sentimental de Ofelia con Sevilla está fuera de dudas. Su esposo, Felipe Cubas, cedió a la hermandad del Valle la peana de plata sobre la que realiza estación de penitencia. Un deseo expreso de la soprano que no pudo ver hecho realidad en vida. Su amistad con Joaquín Turina era manifiesta. Así como con la condesa de Lebrija, que contaba con la soprano para los actos solidarios que fuese menester para aliviar la situación de una Sevilla donde la tuberculosis se había hecho dueña de corrales de vecinos y barrios populares. Así, pues, no es de extrañar que a su muerte, prematura, un 22 de mayo de 1931, la iglesia de la Magdalena convocara a sevillanos de los más distintos segmentos sociales. Tan solo veinte días después de la muerte de Ofelia Nieto, por acuerdo municipal, se acordó homenajear su memoria en la glorieta que lleva su nombre en el Parque de María Luisa.

Fuentes: ABC y Wikipedia. Sigue leyendo >>>