La gran escuela

Por Felivia

Mi Alma Máter está hoy de fiesta y yo celebro con ella. Cumple 477 años y yo justo un día como hoy, pero hace 11 años, egresé de sus aulas como Licenciada en Comunicación Social mención Periodismo, un título al que le agregaron unos honores al grado cum laude que bien representan para mí la distinción más elevada que se pueda recibir, porque para obtener buenas calificaciones la Universidad Autónoma de Santo Domingo además de esfuerzo se necesita buena suerte con algunos profesores (aquí cabe el dicho que en algunas asignaturas es mejor caer en gracia que ser gracioso jajá).
Una de las fotos de la sesión que me hicieron un día antes de la graduación.
Una vez escribí una descripción de la UASD, en la que la llamaba la gran escuela en que aprendes de todo. Decía yo que esa universidad te ofrece una amalgama de oportunidades. No sólo adquieres formación académica, sino también lecciones que marcan tu vida personal y te hacen madurar. Aprendes a compartir, a ser paciente, a ahorrar, a madrugar, a hacer filas, a reclamar tus derechos, a perseverar y a valorar el tiempo. Aprendes que sólo se visten de toga y birrete los que tienen claro su objetivo. Conoces gente de todo tipo: gente que te inspira, que te ayuda, gente que necesita tu ayuda, amigos que se convierten en tus hermanos. La UASD es una aventura, el lugar de las más insólitas leyendas. Es un reto diferente todos los días que tienes que superar, y en esa carrera por superarlo sacas de ti tu mejor esfuerzo y te haces más fuerte y te descubres habilidades que desconocías. La UASD te agota tanto, que por momentos te desencanta. Pero, al final, cuando logras llegar a la meta te sientes tan feliz y satisfecho que eres capaz de recordar con una sonrisa, de contar como un chiste, todas las barreras que debiste derribar para triunfar. Entonces, es ahí cuando te das cuenta de todo lo que la amas y de lo orgulloso que te sientes de ella.

Junto a mi amiga Yanessi Espinal, compañera de tantas emociones vividas en la UASD.
#OrgullosamenteUasdiana