La guerra entre los antiguos mayas (Segunda parte): Organización político-militar

Por Víctor Barrera Alarcón

La guerra entre los antiguos mayas

Primera parte: Aspectos generales del conflicto bélico

Segunda parte: Organización político-militar

Tercera parte: Armamento

Cuarta parte: Atavíos

Quinta parte: Arquitectura bélica

Sexta parte: Guerra y ritualidad

Séptima parte: Representaciones pictográficas y esculturales

Octava parte: Registro escrito, las inscripciones


Continuando con la tanda de artículos sobre la guerra entre los antiguos mayas, hoy vamos a hablar sobre la organización de la guerra, es decir, de quiénes eran los encargados de tomar parte en la contienda y de qué modo lo hacían. Hemos de tener presente que a día de hoy existen importantes debates entre los mayistas sobre el carácter de la guerra entre los antiguos mayas, uno de los más importantes sería el relacionado con sus participantes: ¿se trataban de enfrentamientos donde sólo se enfrentaban las élites o, por el contrario, se trataban de enfrentamientos en los que también participaba el pueblo llano?
Quienes defienden la teoría de un enfrentamiento entre reducidos grupos pertenecientes a la élite de la sociedad se apoyan en el argumento de la total ausencia de referencias a los miembros del pueblo llano en todos aquellos registros epigráficos e iconográficos de los que tenemos constancia donde quedan recogidos diversos enfrentamientos entre poblaciones mayas de los períodos Clásico y Posclásico. No obstante, personalmente no me parece un argumento de gran peso el que, por no aparecer registrado un colectivo se abogue por su inexistencia, es más, un caso parecido, con ciertas salvedades, sería el que podemos encontrar en la obra de Homero, la Ilíada, en la que apenas aparecen referencias a los soldados rasos del ejército, centrando casi por completo la atención del texto en las acciones de los protagonistas, pertenecientes a la élite (tanto griega como troyana).
Por otra parte, aquellos que defienden la teoría de que la guerra entre los antiguos mayas consistía en una serie de enfrentamientos donde la población llana se vería involucrada se apoyan en dos indicios fundamentalmente: por un lado los escritos de los españoles, y por otro, la propia arquitectura defensiva de algunos lugares del Petén y de Yucatán.
  • Atendiendo a las crónicas de los españoles, vemos que se narran múltiples enfrentamientos con poblaciones mayas donde se hace referencia a su abrumadora superioridad numérica, lo que indicaría que se debió de movilizar a la mayor parte de la población masculina adulta de las comunidades.
  • Con respecto a la arquitectura maya con carácter bélico hemos de decir que es tan formidable en muchos de los casos (la muralla de la ciudad de Tikal o la ciudad de Ek Balam) que nos sugiere que los ataques eran realizados por parte de un numeroso colectivo. Si sólo se enfrentasen los miembros de la élite el numero de los combatientes sería muy reducido, casi irrisorio (en muchos de los casos apenas sobrepasaría la centena de hombres) y por lo tanto sería innecesaria la construcción de formidables elementos arquitectónicos defensivos.
Teniendo en cuenta todo lo anterior, lo más probable es que se reclutasen miembros de la población para llevar a cabo las contiendas. No está aún nada claro el proceso de dicho reclutamiento, así como las ventajas obtenidas por participar en la contienda o las sanciones por negarse a hacerlo, tampoco sabemos a día de hoy si la guerra permitía la promoción social como sabemos que sí lo hacía en el caso de los Aztecas.
Pese a todo esto, hay algo en lo que los mayistas sí coinciden, y es en que, sea como fuere, las élites eran quienes iniciarían las guerras y eran también estas élites las encargadas de organizar y dirigir las campañas bélicas.
Atendiendo ahora a la organización político-militar propiamente dicha podemos diferenciar las siguientes figuras:
  • Halach Uinic o Ajaw: Sería el jefe supremo del estado y la pieza principal de la sociedad maya, la mayor autoridad a nivel administrativo, ejecutivo y religioso. 
  • Bataboob o simplemente Batab: Son los señores o gobernantes inferiores cuyo cargo sería hereditario y perpetuo. Serían los magistrados locales, encargados de la administración de los asuntos de las ciudades y pueblos bajo su mando, así como la máxima autoridad ejecutiva y judicial en sus comunidades. En tiempos de guerra eran los encargados de capitanear personalmente a los hombres de su comunidad en la batalla.
  • Nacon: Podemos decir que se trata del cargo militar más importante del antiguo mundo maya. A diferencia del Batab su cargo sería de carácter temporal (el cargo era renovado cada tres años). Su principal función sería la de formular la estrategia de la guerra, era la cabeza pensante del conflicto bélico.
  • Holcan: Traducido al castellano se los conocería como "cabeza de serpiente". Son aquellos miembros de las comunidades escogidos como soldados, y por lo tanto, obligados a acudir con sus armas en tiempos de guerra. Eran poseedores de sus propias tierras, que labraban como cualquier otro miembro de la comunidad en tiempos de paz, pero en tiempos de guerra estaban obligados a abandonar sus labores agrícolas para empuñar las armas, sería en esos momentos en los que no pudieran trabajar sus tierras cuando los Batab se encargarían del mantenimiento tanto del holcan como de su familia. Esto no quiere decir que los holcanes fuesen el único brazo armado del ejército maya, ya que si la situación lo requería el Bataboob podría reclutar más gente entre los miembros de su comunidad cuando los holcanes no eran suficiente.
A grandes rasgos éstos serían los principales participantes en las contiendas, ya fuese como la parte logística del conflicto (Ajaw o el nacon) o como la parte ejecutora de las órdenes (Bataboob o holcanes). No obstante, podemos encontrar otras figuras relacionadas de una manera más indirecta con la guerra como serían los Ahkinoob o los sacerdotes. A grandes rasgos podemos distinguir dos tipos de sacerdotes: los Sayon Nacon (que no debemos confundir con el Nacon anteriormente mencionado), encargado de los sacrificios y cuyo cargo sería vitalicio, y los Chilanes o sacerdotes encargados de transmitir al pueblo las respuestas y mensajes de los dioses. Tal y como he mencionado, no es posible hablar de una participación directa en los conflictos por parte del sector religioso puesto que a día de hoy carecemos de datos que demuestren su participación, pero sí es posible hablar de una colaboración indirecta en la guerra, ya que serían ellos los encargados de interpretar las señales divinas relacionadas con la contienda o de indicar los días propicios para una batalla.
Referencias bibliográficas:-GARZA CAMINO, M. (de la), y NÁJERA CORONADO, M.I. (Coord.); Religión Maya; Editorial Trotta; Madrid; 2002-LOPEZ LUJAN, L. y MANZANILLA, L. (Coord.); Historia Antigua de México (Vol. II: El horizonte Clásico); M. A. Porrúa; México; 2001-LOPEZ LUJAN, L. y MANZANILLA, L. (Coord.); Historia Antigua de México (Vol. III: El horizonte Posclásico); M. A. Porrúa; México; 2001-PALLAN GAYOL, C.; Breve historia de los Mayas; Nowtilus; Madrid; 2011