Desde la isla, el periodista oficialista y perro fiel y faldero del régimen: Pedro de la Hoz, saca la cara por las suspensiones de los conciertos de varios artistas cubanos en Miami, por la presión de la comunidad exiliada, ante quienes se mostraron ante las cámaras de la TV Cubana destruídos por la muerte del dictador Fidel Castro.
Como parte de su columna, en el oficialista Diario Granma, Pedro de la Hoz, defiende la honorabilidad de los artistas cubanos, quienes sin hacer pausa, pretendieron llorar a Fidel en La Habana y venir corriendo en busca de dólares a Miami.
Entre los afectados, supuestamente por la cólera miamense se encuentran Buena Fe, Havana de Primera y Pancho Céspedes.
Es realmente injusto, destaca de la Hoz, que por solamente manifestar condolencias ante un suceso luctuoso, se prive a los cubanos de hacer sus presentaciones en los EE.UU.
Acto seguido, destaca el columnista que Miami es en esencia un sitio donde criminales y terroristas gozan de buena salud, algo que en verdad resulta contradictorio cuando se entiende que los artistas mencionados y otros muchos que no aparecen hoy en lista alguna, gustan tanto de venir a Miami en busca de todo lo que necesitan para sobrevivir en La Habana.
Pancho Céspedes tuvo que cancelar su presentación en Miami tras una polémica desatada con el también cantautor Amaury Gutiérrez. Recordemos que Pancho cuestionó a Amaury por formar parte de la programación del canal América TV que celebraba el cierre de una era con la muerte de Fidel Castro.
En el caso de Buena Fe, la gira que tenían prevista en EE.UU fue suspendida por presiones que recibió la empresa representante de los músicos, Blue Night Entertainment, quien fue presionada a través de mensajes amenazadores.
Havana de Primera corrió la misma suerte. La falta de visas para algunos integrantes de la orquesta y la frase lapidaria de su líder Alexander Abreu, quien dijo: Fidel no se ha ido, permanece, bastaron para que las fechas fueran suspendidas.
La ola de suspensiones es buen pretexto para que los contratistas, artistas y promotores se replanteen ya, cuál es la política a seguir como parte de este relajo cultural disfrazado de intercambio, que bastante poco aporta al acercamiento pueblo a pueblo.
Aunque Miami como destino no es del interés de la política cultural del régimen, fue precisamente el diario Granma el que saltó para hacerse eco de hechos que hasta este momento sólo habían circulado en los medios de prensa del sur de la florida.
Con información de Granma.
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