La Habana quiere ser vitrina para el turismo y desplazar sus calamidades

Publicado el 12 noviembre 2016 por Yusnaby Pérez @yusnaby

El Consejo de Administración Provincial de la capital cubana ha aprobado un nuevo reglamento para aplicar de manera inmediata en 34 zonas de alta concentración de comercio en aras de desaparecer de la vista de los turistas las miserias a las que se expone el pueblo cubano.

El grupo de acciones cuenta con el total apoyo de la policía y los inspectores por lo que será imposible seguir sosteniendo prácticas de sobrevivencia en las zonas consignadas por el Gobierno en La Habana.

Entre las zonas se ubican los alrededores de Galerías Paseo, Variedades de 23 y 10 y el Centro Comercial de Puentes Grandes, todos en Plaza de la Revolución; La Cuevita, La Sorpresa y Virgen del Camino, en San Miguel del Padrón, y Mercado de Egido, Parque La Maestranza y calle Monte, desde Monserrate hasta Indio, en la Habana Vieja.

En el listado también aparecen las inmediaciones del mercado artesanal e industrial Oyantai, del CUPET de Lagueruela y el del Mónaco, los tres en 10 de Octubre; Calzada del Cerro (Monte y Matadero); del Rápido de 101 en El Cotorro; de El Progreso en Alamar y del núcleo urbano de la Villa Panamericana, en Habana del Este, y 51 y 124, en Marianao.

Otras áreas objeto de acciones de enfrentamiento a indisciplinas e ilegalidades son en Centro Habana toda la calle Galiano, desde Malecón hasta Reina, la Plaza de Carlos III y Reina, desde Carlos III hasta Águila; en La Lisa la Avenida de 52 entre 222 y 230; y en Guanabacoa y Regla el núcleo de sus respectivos parques.En este plan integral de ordenamiento, higiene y transformación de su imagen figuran, además, la zona de 5ta. y 42, de 39 y 42 y La Copa, las tres en Playa, y en Boyeros el mercado del reparto Abel Santamaría, de Santiago de las Vegas y de El Rincón, la intersección de 100 y Boyeros (bajo el Trébol) y Altahabana, frente al Hospital Nacional.

Completan la relación el entorno de las áreas de La Palma y de los centros comerciales Porvenir y Casa Sánchez así como también de Calzada de Managua y Progreso, todos en Arroyo Naranjo.

Entre los organismo responsabilizados de hacer valer las condiciones ideales para que sean vistas por los turistas, tabla de salvación de la economía cubana, se encuentran las direcciones de Servicios Comunales, Transporte, Salud Pública, Integral de Supervisión y Control, de Planificación Física, de Trabajo y Seguridad Social y las de los centros ubicados en las inmediaciones de las mencionadas zonas.

Para ello se dice que se colocarán papeleras para que los transeúntes depositen desechos, incrementar a tres veces al día el barrido de calles y aceras, garantizar un control permanente del alumbrado público, remozar las paradas de ómnibus cercanas, y mejorar las áreas verdes incluyendo la reforestación de avenidas principales que lo permitan.

La nota oficial es tan cínica en su espíritu, que culpa a los ciudadanos de las actuales condiciones higiénico sanitarias de las zonas en cuestión, cuando en realidad los habitantes de estas zonas y de todo el país no disponen de condiciones ni para conservar la higiene personal,  y ahora se les quiere achacar un deterioro gradual, que es en gran medida ejemplo del mal funcionamiento de los órganos locales de gobierno y de la crisis absoluta que impera en el país.

Una clara señal del fracaso que acampañará las medidas es el anuncio de que las nuevas medidas serán explicadas en  las asambleas de rendición de cuenta de los delegados del Poder Popular, de los referidos lugares, en los que se hará alusión a este reglamento urbano. Estas asambleas barriales no cuentan ya con la asistencia de antaño porque la gente está cansada de escuchar promesas que caen en saco roto.

El paquete de medidas establece que la música en las viviendas no se podrá escuchar a más de los 60 decibeles, o que no moleste a los demás vecinos, no se podrá realizar actividad festiva que genere ruidos después de las 12 de la noche, y solamente se permitirá echar agua por los balcones los sábados de 6:00 p.m. a 12:00 a.m. y los domingos de 2:00 p.m. a 12:00 a.m. Ver para creer.

El brutal incremento del turismo les ha hecho tomar medidas en La Habana obviando que el nivel de descomposición social y la crisis económica no se resuelve por decretos.

Con información de Cuba sí.

¿Qué Opinas?