Título original: The heretic´s daughter
Autora: Kathleen Kent
Editorial: Espasa
Páginas: 347
Sinopsis:
Nueva Inglaterra, 1692: en la ciudad de Salem está a punto de desencadenarse uno de los vendavales de fanatismo más terribles de todos los tiempos. Una tormenta desatada por la histeria colectiva y la tiranía de las superstición y la intolerancia que se saldó con el encausamiento, condena y ejecución de decenas de personas, la mayoría mujeres, acusadas de brujería. Entre las primeras víctimas de esta orgía de violencia destaca Martha Carrier, una madre que defendió su inocencia hasta el final. Y entre las pocas supervivientes, su indómita hija Sarah. Ambas mujeres soportarán juntas el encarcelamiento y el odio de sus conciudadanos, pero su destino será muy distinto.
Opinión:
Impresión: Podía dar más de si.
Para empezar, lo que más me ha gustado de todo es el realismo que contienen estas páginas. ¿Sabéis esas historias sobre la Segunda Guerra Mundial o el holocausto? ¿Dónde todo es descrito hasta el menor detalle, donde todo parece tan real (porque lo fue)? Pues con este libro, pasa lo mismo.
Las primeras páginas son suficientes para sumergirte en la historia y con todas las descripciones y detalles que irás encontrando a lo largo de la lectura podrás formarte una fiel imagen de la época. Así, podemos encontrar muchos datos históricos y una gran exactitud en cuanto a fechas nombres y lugares, que hacen que la historia sea mucho más verídica.
Además, aunque la trama sea buena (nunca había leído nada sobre los juicios de Salem) y la prosa sea bonita, elaborada y te atrape, creo que a la historia le falta gancho. Todo sucede muy lentamente y las sorpresas son pocas, de manera que no encontrarás ningún gran giro argumental.
Por otra parte, a pesar del tema, quizás sea un relato demasiado objetivo, porque le ha faltado emoción, sentimiento. Los personajes simplemente dejan que las cosas fluyan, que lo que tenga que pasar pase, como si el destino estuviera escrito, sin luchar ni enfrentarse a nada ni nadie, sin sentir realmente.
El único personaje al cuál le vemos un poco de profundidad es el padre de Sarah. Me ha gustado cómo la visión que tenemos de él va cambiando poco a poco, cómo pasa de ser un secundario vacío, sin fuerza, un poco tonto, a alguien capaz fuerte y un padre ejemplar. Me ha gustado mucho más que la madre de Sarah, sin ninguna duda.
En cuanto al final, le pasa como al resto de la novela: muy realista, pero sin sentimiento y quizás, demasiado largo. No sé, creo que hubiera sido mejor algo más impactante que tanto epílogo.
En conclusión, este es un buen libro para saber qué sucedió en Salem, pero aunque es muy realista y tiene una prosa maravillosa, hay pocos diálogos y escasa acción, además de que falta sentimiento.
Y tu...¿qué opinas? ¿Has leído el libro? ¿Habías oído hablar de los Juicios de Salem? ¿Sabes de alguna otra novela que trate este tema? ¿A que no sabías que la autora es una descendiente de los personajes?
PUNTUACIÓN...3/5!