La Historia Compartida…Por César del Campo de Acuña
Sean bienvenidos una vez más a La Historia Compartida, la sección de www.cincodays.com dedicada a las breves biografías de las más variopintas personalidades de la historia. Hoy les voy a hablar de uno de los especialistas en efectos especiales más importantes de la historia del cine.
¿Por qué paso a la historia?: Stan Winston ha pasado a la historia por maravillar a diferentes generaciones con sus creaciones para la pantalla grande entre las que se encuentran: el terminator, el predator, los dinosaurios de Parque Jurásico, Eduardo Manostijeras y la Reina Alíen de Aliens.
¿Sabías que…?: Tras terminar el instituto estudio Pintura y escultura en la Universidad de Virginia. Se graduó en 1968. En 1969, después de pasar por la Universidad Estatal de California se muda a Hollywood con la intención de convertirse en actor ganándose la vida como cómico de escena. Desafortunadamente, la cosa no funciona y es entonces cuando empieza una suerte de prácticas como maquillador en los Estudios Walt Disney.
No es hasta 1972, año en el que monta su propia compañía (Stan Winston Studio), que recibe su primera gran oportunidad. Su primer trabajo es en la película para televisión Gargoyles (La mansión del terror) en el que se encargó de realizar el maquillaje de la Gárgola. Su labor le valió un Premio Emmy (Outstanding Achievement in Makeup compartido con Del Armstrong y Ellis Burman Jr.).
Tiene el “honor” de haber participado en el horrible especial para la televisión: Star Wars Holiday Special de 1978. Stan Winston se encargó de crear los trajes de Wookies que se pudieron ver en el citado programa de televisión.
En 1982 Winston recibe su primera nominación a un Oscar. Fue por la película Heartbeeps de 1981. A lo largo de su carrera ganaría tres Oscar (por Aliens, Terminator:2 y Parque Jurásico) y seria nominado en otras cinco ocasiones. En total, a lo largo de su carrera, fue nominado en 35 ocasiones para diferentes premios y ganó 23 de ellos.
Durante el rodaje de Predator, Stan Winston entro en su habitación del hotel y se la encontró llena de ranas. Winston pensó que se trataba de una broma de Arnold Schwarzenegger por lo que le pido a su equipo que le ayudara a coger las ranas y meterlas en la habitación del actor. Al día siguiente, ni Arnold ni Stan sacaron a relucir el tema. Años más tarde en un programa de televisión Winston contó la historia. Al día siguiente, Arnold visito el mismo programa de entrevistas y dijo que el no tuvo nada que ver con aquello. Los que le gastaron la broma a Winston fue su propio equipo y estos dejaron que pensara que había sido Arnold todo el tiempo durante años.
La importancia y legado de Stan Winston es tan importante para la industria del cine que es uno de los únicos tres especialistas en efectos visuales que tiene una estrella en el paseo de la fama de Hollywood (siendo los otros dos Ray Harryhousen y Dennis Muren). Su estrella está allí desde 2001.
Debido a la inmensa carga de trabajo que experimento Rob Bottin durante el rodaje de La Cosa de John Carpenter, Stan Wiston se prestó a echar una mano con los espectaculares efectos especiales que se pudieron ver en el film.
Su carrera como director es discutible. A pesar de ser el director de segunda unidad de Aliens y Congo, su trabajo como director principal, aunque defendible, es algo mediocre. Su primera película como director fue Pacto de sangre de 1988 (film con el que se llevó un premio al mejor director novel en el Paris Film Festival). Su segundo largometraje fue Gnomo Cop de 1990. Tras aquellas dos cintas solo dirigió tres cortos.
Según sus propias palabras, la película más ambiciosa en la que participo a lo largo de toda su carrera fue Inteligencia Artificial de Steven Spielberg.
Una frase que siempre decía sobre su trabajo (y que luego extendió hasta su estudio y escuela) es que el no hacia efectos especiales. El hacía personajes. El hacía criaturas.
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