La Historia de España filofascista que incubó la Ministra que en 1997 quiso hacer a Franco libegal

Vídeo: Apología al genocidio fascista en las biografias filofranquistas de la Academia de la Historia

Las ovejas dejan rastro allá por donde pasan, los revisionistas también. En 1988 a alguien se le ocurrió destinar casi 1.000 millones de pesetas del erario público a la creación de propaganda de lujo destinada al público pudiente y ávido de novela franquista interpretada bajo la óptica libegal. La idea plasmada en las biografías elaboradas por la Real Academia de la Historia de negar el carácter fascista y dictatorial del régimen de Franco y separar al franquismo del totalitarismo coincide con las denuncias al movimiento revisionista de la Historia que intentó impulsar Esperanza Aguirre Gil de Biedma, Condesa consorte de Murillo y Grande de España, cuando desempeño la labor de Ministra de Cultura y encargó este regalo que recibimos hoy. Actualmente se sirve del ex terrorista Pío Moa para adoctrinar en Madrid a los profesores de secundaria en esta misma forma de “contar la historia“.

ESPERANZA AGUIRRE YA INTENTÓ DEMOCRATIZAR EL FRANQUISMO EN 1997

Josep Ramoneda se despachaba a gusto con la torpeza a la hora de disimular intenciones de la que hacía gala la Ministra de Cultura de Aznar. En el diario El País en 1997 bajo el título “Historia e ingenuidad”

“Dice la ministra que sólo se le han reprochado dos cuestiones concretas: la utilización de la palabra “unitario” y el eufemismo “la época de Franco” para hablar de la dictadura.”

Para certificar la veracidad de lo que cuenta Ramoneda, hay un pasaje infalible. Nos desvela que ya entonces recomendaban a Aguirre que dejase de hacer el ridículo intentando travestir cristofascismo de “libegal“.

“Lo liberal y lo intervencionista. La ministra, que jura por Hayek, repite a menudo sus creencias liberales. Y, sin embargo, sus argumentos son netamente intervencionistas. Dice que, pese a su descalabro parlamentario, seguirá con el decreto porque la ley lo exige. La ley otorga al Ministerio de Educación la potestad de fijar, en las comunidades históricas, un 55% de temas obligatorios en los planes de estudios de la enseñanza media. Esta facultad se puede ejercer o no ejercer. El PSOE optó por no utilizarla plenamente. Sorprende que sea una ministra liberal quien lleve hasta los límites legales su capacidad de intervención, pero es sabido que los liberales, como todos, están llenos de contradicciones. Traducido a la práctica este 55%, si se cumple, supone una reducción al mínimo de los temas propuestos por cada autonomía o a asegurar que, como casi siempre, no se llegue apenas a la historia contemporánea. Hay, por tanto, una voluntad decidida de intervenir, que se podría haber omitido perfectamente. Dar este paso no es ninguna ingenuidad.”

El precio de venta al público de la enciclopedia con efecto viagra sobre el brazo derecho es de 3.500 euros:  salvo que sorteen algún lote en Intereconomía, no va a ser posible echarse unas risas con la “obra” antes de usarla de papel del váter.
Además de democratizar al asesino de 150.000 españoles por sus ideas izquierdistas, también  hace la labor de propaganda electoral de “centroderecha“: Manuel Jesús González , que ocupó el cargo de jefe adjunto de la asesoría económica de la Presidencia del Gobierno del PP y fue Secretario de Estado de Universidades, Investigación y Desarrollo durante la etapa de Esperanza Aguirre, firma las biografías sobre José María Aznar y la Condesa libegal en la “Larousse” del fascio redentor.

En el texto dedicado a la más libegal del mundo mundial, el felón escritor asegura que durante su mandato como presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre “se enfrentó reiteradamente a las actuaciones del Gobierno de Rodríguez Zapatero” y “recuerda sin descanso que la Hacienda Central no ha invertido un solo euro en obra nueva para la Comunidad“. 
El patético ejercicio de pelotilleo también afirma que elpaso por el Senado de la neocón del PP “mereció la aprobación y el respeto de todos los grupos políticos por su flexibilidad por lo que contribuyó a reforzar el control parlamentario“. En cuanto a su paso por el área de Cultura, Gónzalez indica en el Diccionario Biográfico que Esperanza Aguirre “modernizó el archivo de Indias, y amplio y reformó los grandes museos nacionales: el Museo del Prado, el Thyssen y el Reina Sofía, el del Ejército y el Nacional de Escultura de Valladolid“. 
El clímax de la biografía llega cuando relata el atentado que sufrió en Bombay. La presidenta de la Comunidad de Madrid “sobrevivió en condiciones dramáticas” y añade que “en estos episodios, no pocos observadores vieron, al lado del beneficio de la suerte, una capacidad especial para adoptar decisiones rápidas en situaciones críticas o para adaptarse a lo inesperado“. También explica que “es amante del arte, del cine y el teatro, y además, gran defensora del deporte. Habla inglés y francés y es jugadora de golf“, e incluso precisa que tiene “un buen hándicap“.