La historia de Pablo, la historia de muchos.
Publicado el 14 marzo 2014 por Juanjocesc
@juanjocesc
Pablo es un joven normal, de esos que pertenecen a la famosa "generación mejor formada de la historia", que cursó sus estudios en la Universidad y que no sin esfuerzo pudo obtener su grado. Estudia inglés cuando puede para sacar el B1, hace algún curso de especialización en el ámbito de su carrera y se dedica a buscar trabajo. Siempre ha querido trabajar para él mismo pero no tiene recursos, tiene muchos sueños relacionados con sus inquietudes.
¿Te suena su historia? Seguro que si...
...sigue viviendo en casa de sus padres, y mientras intenta trabajar en el bar de un conocido los fines de semana y da clases particulares a algunos niños pequeños para pagar los desplazamientos a las ciudades donde va a buscar trabajo y para sus 4 caprichitos. Por las tardes, suele hacer deporte y no pocas noches ve una película o serie en el ordenador antes de dormir.
Aunque en su pueblo es feliz, tiene pocos gastos y tiene el plato de comida y la cama, a Pablo le gustaría cambiar de vida, tener trabajo, poder independizarse, vivir otras experiencias.
Un día, recibe una llamada inesperada desde una gran ciudad a 500 km de su casa donde una vez dejó un curriculum. Las condiciones no son las idílicas y ni siquiera es un trabajo relacionado con sus estudios, pero él va a arriesgar. Quizás sea el puente hacia otro trabajo mejor.
Después de un tiempo, Pablo, trabaja más de 9 horas practicamente todos los días de la semana salvo Domingos, a turno partido, y tarda una hora en ir y en venir de su trabajo. El sueldo que tiene le da para mantenerse, pagar su piso, comer, y las necesidades básicas en aquella ciudad, poco más. Cuando lo piensa fríamente, antes en casa, ahorraba más.
Se siente trabajando, productivo, pero está frustrado, no cree que tenga nuevas oportunidades ni dentro ni fuera de su empresa, algunos días llega a casa tan cansado que sólo le da tiempo en pensar que pronto tendrá que volver otra vez al trabajo y corre a toda prisa para preparar algo de comer y descansar lo antes posible en la cama.
Cuando le da tiempo pensar otras cosas, piensa que en realidad, aunque con trabajo, está en una ciudad que no es la suya, trabajando en una empresa en la que no está a gusto del todo y en algo que no se corresponde con sus estudios ni siquiera con lo que a él se le da bien del todo, le frena dejarlo porque ve que los años le van cayendo encima de la espalda y bueno, vive al día, y va a tirar para adelante, ya vendrán tiempos mejores, piensa, aunque por él, volvería a su ciudad a seguir buscando y cumpliendo los sueños que tenía hace años y que en esa situación es casi imposible cumplir.