La hora más oscura (Chris Gorak, 2.011)

Publicado el 19 febrero 2013 por Rugoleor @rugoleor


La hora más oscura (Chris Gorak, 2.011)
Ficha:
Título Original: The Darkest Hour.
Director: Chris Gorak.
Guionista: Jon Spaihts.
Intérpretes: Emile Hirsch, Olivia Thirlby, Max Minghella, Rachael Taylor, Joel Kinnaman, Dato Bakhtadze, Yuriy Kutsenko, Artur Smolyaninov, Pyotr Fyodorov, Nikolay Efremov.
Productores: Timur Bekmambetov, Tom Jacobson.
Fotografía: Scott Kevan.
Música: Tyler Bates.
Montaje: Fernando Villena, Priscilla Nedd Friendly.
País: Estados Unidos.
Lugares de rodaje: Moscú (Federación de Rusia).
Año: 2.011.
Duración: 91 minutos.
Edad: No recomendada para menores de 7 años.
Género: Acción, Ciencia Ficción, Suspense, Terror.
Distribuidora: Hispano Fox Film, S. A.
Estreno: 13-01-2.012.
WEB Oficial: Web Oficial de la película en España.
Espectadores: 136.639.
Recaudación: 1.033.205,42 €.
Calificación: 5,362.
Sinopsis:
Los termómetros marcan 40 grados durante la ola de calor más intensa de la historia de Moscú. Dos jóvenes buscan cobertura bajo un coche de policía abandonado en la Plaza Roja, ahora completamente desierta. No están buscando una sombra para resguardarse del sofocante calor. Tratan de evitar que les localicen unos alienígenas camuflados que han colonizado la ciudad. Desde hace algunos días, estos jóvenes y sus compañeros se han visto obligados a buscar refugio bajo tierra, ya que la ciudad, como el resto del mundo, ha sido diezmada por una amenaza alienígena. Ahora han de esconderse, cuentan con pocos suministros y buscan desesperadamente seguridad, algo difícil de encontrar incluso en la mayor atracción turística moscovita.
Crítica:
15-01-2.012 – ANTÓN MERIKAETXEBARRIA
Pánico en Moscú
En "La hora más oscura" no se anda con chiquitas el bisoño realizador Chris Gorak a la hora de describir los estropicios perpetrados por una tremebunda invasión alienígena en Moscú, visitada por un grupo de jóvenes turistas en el momento más inoportuno del tinglado. Lo cual da pie para mostrar algunos de los lugares más emblemáticos de la capital rusa, incluida una desértica Plaza Roja, conforme los 'aliens' se dedican a fundir -y nunca mejor dicho- a todo quisqui con un entusiasmo digno de mejor causa. El pánico que suscitan semejantes entes extraterrestres es el elemento distintivo de una trama vista una y mil veces, trufada de decentes efectos especiales, y poco más.
Pero la posible identificación del espectador con los chicos y chicas protagonistas de la anécdota resulta a todas luces insuficiente a la hora de convertir el filme en algo distinto a lo habitual, vista y comprobada la pobreza de un guión con más agujeros que un colador y la escasa consistencia de un reparto de actores y actrices de nueva hornada, a los que sin duda les falta un hervor. Todos estos elementos están subordinados a una acción chirriante y fantasiosa que, más allá de toda coherencia narrativa, acelera de forma sincopada el ritmo de la película mediante una planificación y un montaje que revelan inexperiencia por parte de su máximo responsable.
Porque nada hay en "La hora más oscura" que apasione o cuando menos mantenga el interés del público, tal vez por culpa de una narración morosa, la ausencia de un clima verdaderamente terrorífico y las imprescindibles atmósferas amenazantes, capaces de salvar de la quema esta fallida mixtura de terror y ciencia ficción para quinceañeros. Por si fuera poco, se echa de menos la malicia demostrada por Tim Burton en "Mars Attacks!" o los aliviaderos humorísticos propios de un relato que no conviene tomárselo demasiado en serio. Como aquella vez que, mirando a las estrellas, alguien nos preguntó: «¿Pero dónde ha ido a parar el techo?»