La humanidad del juez

Publicado el 10 febrero 2015 por Javier Marcos Angulo @clamorsegovia
No quiero generalizar, no es mi estilo, salvo raras excepciones. Voy a intentar no herir susceptibilidades a nadie, faltaría más.
Como reza el título de esta reflexión, voy a tratar de escribir sobre este tema dentro del llamado 'poder' judicial, que a mi, personalmente, no me gusta denominar así.
Últimamente, los que tienen la paciencia de seguir leyéndome, saben que suelo denominar a la Justicia, alguna vez que otra, con la palabra Pesticia, que de momento no la encontraréis en el DRAE, pero encontraréis Mesticia, que significa,  aflicción, pena, tristeza.
Es una verdadera tristeza tener una Justicia, como la que soportamos. No quiero generalizar, ya lo he indicado más arriba, pero a veces, solo a veces, no me gusta que se archiven causas, que claramente pudieran ser enjuiciables, por eso digo que en vez de Justicia, tenemos Pesticia.
Vaya por delante que algunos jueces (si somos sinceros, se pueden contar con los dedos de una mano) insisten en ejercer su profesión con decoro, con mucho sentido común y sobre todo dentro de la ley.
Pero existen otros (quizá demasiados para mi), que ejercen al dictado de las presiones del poder Ejecutivo, que no se andan con zarandajas y consiguen, como digo, archivar causas que no les interesa que se enjuicien.
Creo, sinceramente que no se puede estar a las órdenes del Gobierno de turno, para en definitiva diluir a una Justicia que debería ser independiente, para acabar siendo una Pesticia.
Los ciudadanos debemos procurar que nuestras voces se oigan en el Parlamento, para conseguir lo que en  la Carta Magna dice. Tener una Justicia independiente, por el bien de una democracia saneada y limpia.
Personalmente, apelo sencillamente al bien hacer, para que destaque la humanidad del juez.