Estudios sobre la imitación de los monos ha revelado que podría ser útil para reparar problemas en donde la imitación y creación de lazos ha sido dañada. El autismo podría verse beneficiado con estudios hechos a monos.
Según investigadores de la revista Science, no sólo los humanos tienen preferencia por aquellos que imitan su conducta, los estudios revelan que los monos capuchinos también tienen debilidad por quienes imitan su comportamiento.
Este estudio podría dar pie a una investigación más profunda en relación con el desorden del autismo, pues este es una afectación donde la imitación y creación de lazos esta dañada. Los especialistas en conducta de Estados Unidos e Italia, revelan que durante el estudio los monos tuvieron una preferencia hacia los investigadores que los imitaban.
El estudio consistía en asignar a cada mono dos investigadores, uno que lo imitaba en sus movimiento mientras jugaban con una pelota, mientras otro investigador no lo imitaba. Al alejarles la pelota, los monos siempre mostraron preferencia por aquellos investigadores que imitaron su conducta, demostrando que la imitación es una especie de "adhesivo social", que tanto humanos como los monos tienen en común.
Según el sitio Reuters, los investigadores concluyen que observando la manera en que la imitación simula un lazo afectivo en primates, esto puede ayudar a comprender el desorden del autismo, donde esos lazos han sido dañados.