Aquellos que practican en running tienen asumido que es imprescindible disponer de un buen calzado para practicarlo. Sin embargo en otro tipo de deportes en el que los pies parecen que no tengan una importancia tan acentuada puede suceder que no se utilice un calzado adecuado.
Un ejemplo de ello puede ser el ciclismo, en el que el motor fundamental son las piernas, pero los pies como no van apoyándose en el suelo como en el caso del running podemos pensar que no es necesario disponer de un calzado específico.
Evidentemente si sólo cogemos la bici 20 minutos a la semana para dar una vuelta con el peque por un carril bici no es necesario llevar calzado específico y por lo tanto pedales automáticos. Pero sin embargo, si vamos a introducirnos en el mundo de la bicicleta y vamos a montar en bici con cierta asiduidad lo ideal es llevar pedales automáticos con su correspondiente calzado específico.
A continuación vamos a dar una serie de razones por las cuales es importante ir en nuestra bici con pedales automáticos.
Para empezar nuestro pedaleo será más eficaz. Esto es así porque con los pedales automáticos se hace fuerza tanto cuando el pie va hacia abajo como cuando el pie va hacia arriba, es decir, aprovechamos toda la circunferencia del pedaleo. Sin embargo, si vamos con los pedales de plataforma de toda la vida sólo podremos hacer fuerza cuando los pies descienden.
Otra ventaja importante de llevar pedales automáticos es que vamos anclados a la bicicleta, y esto aunque a priori pueda parecer peligroso es una ventaja muy importante. Nuestro control sobre la bicicleta será mucho mayor y ganaremos en seguridad, ya que podremos hacer ciertas maniobras como saltos para evitar obstáculos. Además evitaremos que nuestros pies puedan escaparse de los pedales, como sí puede ocurrir en el caso de ir con pedales de plataforma.
Y la otra ventaja definitiva de llevar pedales automáticos es que nuestro pie, al ir enganchado, siempre irá en la misma posición, por lo que nuestro pedaleo siempre será limpio y sin cambios de posición. Con los pedales de plataforma nuestro pie puede cambiar ligeramente de posición respecto al pedal, y estos cambios de posición a la larga pueden provocar lesiones. Lo que si que debemos asegurarnos con los pedales automáticos es que las calas estén correctamente colocadas para que nuestros pies vayan siempre en la posición correcta.
En cuanto a inconvenientes respecto a los pedales de plataforma, que también los hay, podemos destacar dos.
Uno de ellos es el precio. Tendremos que comprarnos los pedales automáticos y también las zapatillas específicas, y sin embargo los pedales de plataforma son más baratos que los automáticos y nos vale cualquier calzado.
El otro inconveniente es el período de adaptación a los pedales automáticos. Al principio puede resultar complicado adaptarse, sobre todo a la hora de desengancharse. Casi todos los ciclistas que empiezan a usar pedales automáticos puede que al ir demasiado despacio o al hacer una parada no tengan aún la habilidad suficiente para desenganchar el pie del pedal y caiga al suelo. No obstante esto va a pasar solamente las primeras veces que los usemos. Una vez que los hayamos usado tres o cuatro veces ya tendremos la habilidad suficiente como para desengancharnos en cualquier situación.
No obstante en el mercado existen pedales que son mixtos, es decir, podemos ir enganchados a ellos y disponen también de una pequeña plataforma en la cual podemos apoyar los pies en las situaciones que lo estimemos oportuno.
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