Unos cuantos motivos para dejarlo y/o no desfallecer. Viaje al centro de la nada del puto periodismo, uno de los benditos oficios más antiguos y denostados. Ahí va el texto publicado por Juan José Téllez en La Voz. El escritor, poeta y plumilla sabe de lo que habla.
"Jornadas kilométricas, contratos que a veces no existen, salarios mileuristas. Los pobrecitos habladores -así llamaba Mariano José de Larra a los de nuestro oficio-siempre están a punto de la revolución pero casi nunca llegan a emprenderla. Al menos, se quejan; lo que ya es mucho en los tiempos que corren. Más de centenar y medio de profesionales de la comunicación asistieron hasta ayer sábado al IV Congreso de Periodistas de Andalucía que tuvo como escenario la sala Compañía de Jerez y en el que se sentaron las bases para una Declaración de condena a la precariedad y de reivindicación del orgullo de este oficio por aquello de «soy periodista pero mi madre cree que toco el piano en un prostíbulo».
«Dignidad, libertad y futuro» fue el adecuado lema que abanderó esta convocatoria, a sabiendas de que la nota de corte de la promoción de periodistas de hace diez años era la más alta del país junto, eso sí, con la de Fisioterapia: en el primero de estos casos, es probable por lo tanto que algunos de los mejores cerebros del país terminen en el paro, si es que no lo están ya bajo un tsunami de eres y despidos que vienen afectando a todos los medios y que quien esté libre de culpa que tire la primera piedra. La crisis, sin embargo, no sólo viene afectando -y de qué manera-a medios legítimos sino a otros que utilizaban el periodismo como caballo de Troya para la influencia política, el blanqueo de dinero o como presión para negocios urbanísticos.
Delegaciones de diez asociaciones de la prensa de Andalucía, Ceuta y Melilla, representantes sindicales, directores y responsables de distintos medios de comunicación andaluces se vieron las caras en el encuentro jerezano que también sirvió para rendir justo homenaje a uno de los profesionales andaluces más veteranos, Enrique García, histórico jefe de redacción de la cadena Ser en la transición, responsable de comunicación en el arranque de la Junta y tertuliano, en la actualidad, de Canal Sur.
Profesores y comunicadores de prestigio como Antonio Checa, Antonio Ramos, Juan Antonio García y Carmen Morillo desmenuzaron diversos aspectos de la situación que aflige al periodismo de Andalucía y en el resto del Estado, tal y como cabe deducir del Informe Anual de la Profesión, dirigido por Pedro Farias, profesor de la Universidad de Málaga y cuyos datos son reveladores de cómo perciben la situación profesional los propios informadores. Lo que extraña es que nos preocupa más el intrusismo que el paro, a pesar de que los datos son apabullantes: el 25% de los encuestados dice haber perdido su trabajo, mediante ajustes de plantilla, despidos, cierres o expedientes de regulación de empleo, a pesar de que el porcentaje oficial lo sitúa en el 17%.
Del análisis de cincuenta convenios colectivos que afectan a unos 17.000 periodistas, se desprende que el sueldo medio de los periodistas es de unos 30.000 euros brutos anuales -para que nos entendamos, menos de 1.500 líquidos al mes-, aunque el informe detalla a su vez los salarios de redactores jefes, jefes de sección, redactores senior y redactores junior de varias decenas de medios. Buena parte del informe se base en una encuesta de autoestima e identidad profesionales realizada a 1.000 periodistas, de los que el 66% señala que la crisis ha reducido su sueldo. También queda claro que ha disminuido el número de contratos indefinidos (0,9%) y un aumento de los contratos temporales (del 8% al 13,7%). Según los encuestados, las causas de todo ello se relacionan con las «estrategias de las empresas para reducir costes, la devaluación del puesto de periodista o del exceso de la mano de obra» que se oferta en el mercado frente a la escasez real de plazas laborales. Según el Servicio Estatal de Empleo Público, hasta septiembre de 2010, había 5.564 periodistas registrados como parados, frente a los 5.155 de 2009. De ellos, el 66% son mujeres y el 34% son hombres. También descuella el aumento de los periodistas demandantes de empleo, no necesariamente ocupados, que llega a 7.069 frente a 6.668 de 2009. Dicha cota llegará a partir de junio a 10.000 cuando presumiblemente se incorporen a las listas de parados los nuevos licenciados. En las 37 universidades que imparten Periodismo en España, se registra hoy un total de 18.681 alumnos matriculados en Periodismo, que podría aumentar en 2011 en 3.000 matriculados más debido, entre otros factores, al aumento de facultades que ofertan la titulación. Es decir, que existen serios indicios de lo que Fernando González Urbaneja, presidente de la Asociación de la Prensa de Madrid, califica como un «desajuste importante entre el mercado universitario y el laboral».
La espiral de despidos puede multiplicarse este año. El grupo de comunicación PRISA ya remitió en enero un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores en el que anunciaba que iba a acometer un proceso de reestructuración que habría de afectar al 18% de su plantilla a nivel mundial, lo que afectaría a 2.500 trabajadores del grupo, eso sí, en todo el mundo y en todas sus unidades de negocio y áreas de actuación. ¿Qué ocurrirá en los medios públicos? Este año, después de las municipales, es posible que cierren numerosas emisoras locales. ¿Y qué pasará en 2012 si las generales las gana un PP que ya ha dejado caer que no todas las comunidades autónomas necesitan televisión propia?
Así las cosas y sin que el empleo y el negocio del periodismo digital termine por despegar, lo más extraño del Informe es que a pesar de que la encuesta refleja que los periodistas tienen de sí mismos una imagen «regular o mala», los profesionales de la comunicación «animan a sus hijos a que estudien periodismo». Ojalá que la serena rebelión de los periodistas fraguada en Jerez no se quede en hipótesis".
Dejo el enlace de la web de Téllez ... http://www.juanjosetellez.com/
Salud y todo lo demás !!!