La increíble oportunidad de vivir en Cancún y por qué debes tomarla

Por Alfredoparedes @AlfredooParedes

Quiero compartir contigo lo que me motivó a venir a Cancún y no querer regresar a mi lugar de origen. Es cierto que cada persona ha tenido su experiencia en este paraíso caribeño y lo que te comparto puede no aplicar a todos, pero estoy seguro que te servirá para que por fin tomes una decisión:

Quedarte en donde estás, tal y como estás, o hacer maletas y venir a Cancún a iniciar ¡la aventura de tu nueva vida!

¿Por qué decidí vivir en Cancún?

Entre todas las respuestas posibles, la mía es sencilla: Porque es el paraíso, en todos los sentidos.

Tuve la suerte de llegar a Cancún con un empleo, que no era el soñado, pero me abrió la mente y las posibilidades a una vida que hoy disfruto con mucho gusto y placer.

Decidí venir después de darle vueltas por varios días a una propuesta de mi prima Adriana, para trabajar en una universidad como profesor de Inglés. No es lo mío ni me dedico a eso, pero ella me lavó el coco diciendo: "Tómalo como vacaciones pagadas durante un cuatrimestre. Conoces, ves si te gusta y si no, te regresas".

Mi amigo Christopher que ya lleva bastante tiempo viviendo en Playa del Carmen, me dió el último empujón: "El que viene a Cancún y no la hace, es porque es muy pen***jo".

Mis razones:
  1. La necesidad. Podría hacer una lista de varios motivos, pero todos se reducen a este y estoy seguro que también los tuyos y los de muchos. Después de una mala racha, se me presentó esta oportunidad y lo dudé poquito, pero al fin me decidí. Tener un empleo nuevo, diferente, algo que nunca había hecho, donde sólo trabajaría 4 días a la semana durante 6 horas, con una paga no tan buena pero tampoco necesitaba más y lo mejor... ¡en Cancún! No podía pedirle más a la vida...
  2. Necesitaba un cambio urgente. Aunque en Apizaco, en el estado de Tlaxcala, está mi hogar, mi vida prácticamente estaba hecha en la ciudad de Puebla. Ahí viví desde el año 2000, tuve mi primer empleo formal en Exa Fm como locutor, hice entrañables amigos y la ciudad me encanta. Después, en 2012 me mudé a Poza Rica, Veracruz y seguí trabajando para Exa Fm... Algo cambió en mi vida y seis meses después no tuve más opción que volver a mi hogar. Unas semanas más tarde regresé a Puebla, pero nada fue igual ni siquiera en lo más mínimo. Jamás había sentido tanto vacío, pérdida, depresión y tristeza. Mi vida emocional y profesional ya no eran las mismas. No era yo, o más bien era un "yo" que nunca había experimentado... En realidad no me había dado cuenta de que necesitaba un cambio drástico y urgente.
  3. Mi prima Adriana, mi salvación. Nunca había tenido en mente a Cancún; parecía otro país para mí. Pero en 2015 ya no fue así. Adriana me motivó a venir a Cancún y mi vida dio un giro de 180 grados. Ahora tenía un reto (un trabajo que nunca había hecho), una motivación-compromiso (hacerlo bien y demostrarme que sí podía) y lo más importante, tenía no sólo una oportunidad, sino LA OPORTUNIDAD de recuperar al Alfredo que había perdido el rumbo.
  4. Mi amigo Christopher que siempre estuvo ahí desde el comienzo. Me aconsejó bien y se lo agradezco mucho. Con él tuve mi primer fin de semana de fiesta, pero de eso hablaré después.

Y como no tenía nada que perder pero sí mucho que ganar, hice maletas y tomé un avión a Cancún el 17 de mayo de 2015. Estaba lleno de incertidumbre pero muy motivado. ¿Te imaginas mi cara de felicidad?

Ahora disfruto de un empleo que me gusta, tengo muy buenos amigos, conozco lugares que no imaginaba, me divierto y la paso bien. Y lo mejor es que también he podido conocer aspectos de mí que en otras circunstancias no hubiera conocido. ¡Cancún me cambió la vida! Y lo sigue haciendo.

Decídete ahora mismo

Si has llegado hasta aquí, quiero decirte que he compartido contigo todo este rollo para motivarte a tomar la decisión de vivir en Cancún.

No importa los problemas, necesidades o motivaciones que tengas, en Cancún hay empleo seguro (aunque debes tener mente abierta para realizar cosas que tal vez nunca pensaste hacer). Si estás pasando por un periodo de depresión (a todos nos pasa), Cancún te da la oportunidad de disfrutar su increíblemente hermoso y relajante mar, de tranquilizarte mucho y prepararte para comenzar tu nueva vida. ¡Es muy motivador!

Si solamente quieres probar suerte, estoy seguro que vivir en Cancún no sólo te dará lo que buscas, sino mucho éxito, amigos, vivencias y experiencias muy gratificantes en lo que te propongas (eso sí, debes ser disciplinado como en todo en la vida), porque Cancún tiene tantas oportunidades para todos, que en realidad no podemos imaginar a dónde nos llevará tanta abundancia hasta vivirlo en carne propia. ¡Decídete ya!

¿Y qué hay de lo malo?

Cuando llegué a Cancún no pensé en nada negativo, aunque no todo es paradisíaco. Por supuesto también hay cosas malas y te las contaré todas, pero no como lo hacen los chismes de Facebook o los amarillistas de los medios de comunicación. Conocerás los días malos en Cancún y qué puedes hacer para para que no sean tan difíciles.

Vivir en Cancún también implica sortear la violencia, la falta de servicios o la mala calidad de los mismos, las personas desagradables, el tráfico, las malas costumbres... Cancún también tiene días de mala suerte. Han sido pocos, pero algunos me sacaron canas verdes, otros me dieron miedo y otros, como una mala película de terror, ¡me causaron risa!

Por lo pronto te invito a que compartas conmigo si te gustaría vivir en Cancún o qué te impide hacerlo. Estoy seguro que tienes muy buenas razones para querer venir y tal vez alguna dificultad para lograrlo. Espero tus comentarios.

¡Hasta la próxima!