Que los políticos no nacionalistas llevaran escoltas se veía normal, lo mismo que se pudiera hacer apología y humillación a las victimas. Era visto como normal que 200.000 vascos tuvieran que autoexiliarse, alterando los resultados electorales a favor de los nacionalistas. Si a todo eso nos acostumbramos sin rebelamos ,¿Porque no nos vamos a acostumbrar ahora a que el vicepresidente del gobierno sea hijo de un militante del FRAP o que el gobierno de España se apoye en los que la quieren destruir?
Dejamos a las víctimas solas y tragamos con todo, incluso con que un partido franquicia del terrorismo llegue a ser decisivo para aprobar los presupuestos, que se llame a Otegui "hombre de paz" y que el presidente de el pésame por el suicidio de un terrorista.
España está moralmente enferma y no se si nos hace falta un psiquiatra o un buen revulsivo. Lo que si es cierto es que la batalla moral del relato la están dejando en manos de los ASESINOS, y ante tamaña traición a la decencia no me extraña que poner coches bombas o pegar tiros en la nunca sea considerado una heroicidad.
Pobre España que sola te han dejando y como te han envilecido desde los partidos políticos, logrando que matar sin arrepentirte y sin colaborar con la justicia salga gratis e incluso te eleve hasta la dirección del gobierno.
Tony