La Insatisfacción De Los Hijos Del Rey. Capitulo 7

Publicado el 13 enero 2019 por Carlosgu82

Capitulo 7. El tiempo pasa

El  tiempo y el trabajo fueron factores decisivos para que la tristeza y la rabia, abandonaran los corazones de los hijos del Rey. El momento doloroso de dejar su hogar, fue sustituido por la alegría de sentir que se ganaban todo lo que tenían. Ese nuevo sentimiento fue el bálsamo que tranquilizó a sus almas.

Dos años transcurrieron desde que Augusto y sus hermanos dejaron el palacio; y aunque la distancia los había separado de sus padres, estos nunca perdieron los pasos de sus hijos. Sabían donde vivían, cuáles eran sus amigos, el progreso que estos hacían en sus carreras y cuan feliz se sentían por todos sus logros. Máximo y Helena estaban convencidos que lo que había sucedido hasta ahora, era lo mejor, sin embargo el rey sabía que el plan ni siquiera había llegado a su cuarte parte, pero su esposa no estaba enterada de este detalle. Por esta razón, la Reina se paseaba alegre y sonriente con una copa de vino en la mano, en el mismo balcón donde vio a sus hijos partir, pensando que todo había terminado. – Esposo mío. Ayer estaba triste, porque nuestros hijos se fueron de casa. Hoy celebro el éxito que tienen, gracias a la medida que se puso en práctica. Aunque reconozco que fue difícil para mí, dejar mi hogar por estos años. –dijo Helena.  – La decisión de  irnos del palacio fue, a favor de nuestros hijos, de esa manera no podían arrepentirse y regresar – aclaró Máximo.

Muchas veces pensé que esta parte del plan era arriesgada, ya que nunca les mencionaste que nos iríamos también del palacio, y si se fueran enterado que ya no estábamos aquí, se fueran confundido. Querido Esposo, ¿Ahora los invitarás a regresar a casa?  – mencionó Helena. El rey se acercó a su esposa y le tomó la mano con cariño y le dijo: – Todavía falta mucho para completar el plan. Esta primera faceta, les mostró, sin lugar a dudas que la felicidad viene de ganarse todo lo que se tiene, aun cuando todo esto les pertenece. Helena colocó la copa en una silla que estaba cerca del balcón y cambió su semblante a uno serio y pensativo – Amado Rey, ¿Cambiaste el  plan a última hora?, ¿Hay algo que no me has contado?, ¿Por qué me ocultaste, el resto del plan? – dijo la esposa del Rey. – Calma, te mostré todo el plan que diseñé para que nuestros hijos dejaran la tristeza, y pregunto ¿Se han logrado los objetivos? La respuesta es sí. Sin embargo, el día que fui a visitar  a los sabios, estos me dijeron que el plan lograría los resultados que ya hemos visto, pero no, les ayudaría a conseguir la paz y la felicidad absoluta. Y la razón, es que no tomé en cuenta algunas variables – dijo el Rey. – ¿Cuáles son esas variables? Por favor dímelas – intervino Helena.

Máximo tomo  a su esposa de la mano y la llevó a sentarse en la sala cerca del balcón, para contarle lo que había hablado con los sabios.

Esta historia continuará…