Como muchos ya sabréis, la primera vez que de Mary Jane Watson apareció físicamente en un cómic fue en The Amazing Spider-Man #25 (junio de 1965), si bien aquella primera aparición -dibujada por el irreverente Steve Ditko- tenía trampa, pues se cuidaba de no mostrar el rostro de la joven que, convenientemente, aparecía tapado por una planta como recurso para prolongar en el tiempo el misterio de su auténtico aspecto. Así, no sería hasta el The Amazing Spider-Man #42 (noviembre de 1966) que se desvelaría su fisonomía. Para entonces, mi admirado John Romita ya se había hecho con los lápices de la serie, y dejó para el recuerdo la legendaria viñeta de "Acéptalo, tigre, ¡te ha tocado la lotería!" (que corona este artículo). Pero... ¿sabíais en quién se basó el artista para la apariencia que acabó dándole a la pelirroja?
Primer boceto de Mary Jane
Según reconocería posteriormente Romita, como guía usó fotos de la actriz Ann-Margret, una sueca escultural que actuaba, cantaba, bailaba y se estaba labrando una carrera en Hollywood con películas como Bye, Bye, Birdie de 1963 o Viva Las Vegas (junto a Elvis Presley) de 1964.
Sabiendo esto, no es de extrañar lo bella y explosiva que acabó resultando la Mary Jane primigenia, y por qué no daría la talla para el papel la sosainas de Kirsten Dunst.
Ann-Margret, la actriz en que se basó Romita para diseñar a Mary Jane, y Kirsten Dunst, que acabaría interpretándola muchos años después en la trilogía de Raimi