En fin, Vicente, que la vida es un reto que consiste en buscar en ella lo que no hay (¡maldición!, dirás, ¡otra vez, está Javier hablando de Dios!).
Y respecto de nuestra desgraciada España, me muevo, Vicente, por los mismos raíles argumentales: yo no digo que nuestra nación sea un ente que alguna vez haya existido cabalmente y que no pretendamos sino reconstruir o recuperar. Una nación, decía Ortega, es un proyecto sugestivo de vida en común, no una vida en común ya realizada. Digo, eso sí, que lo que la historia ha puesto ante nosotros (como la naturaleza puso ante nosotros las guarradas aquéllas) es la obligación moral y cívica de ir construyendo esta entidad llamada España, y no ya, sobre todo desde la Ilustración, reconstruir la tribu vascona ni los condados catalanes.
Date por vencido, Vicente: no tenemos otra cosa que hacer, ni siquiera en esto de España, que seguir buscando lo que no hay.