Quisiera comenzar con alguna cosilla negativa, aunque hay más bien pocas. Los cambios que se han hecho me parece razonables, la verdad, aunque me apena mucho que no se hiciera mención a los preciosos cuentos de Max, que escribe para huir del horror de la guerra, y que le regala a Liesel. En la película, le entrega el cuaderno vacío para que ella lo llene. Es una pena este cambio, porque me enamoré de los cuentos de Max, pero creo que es fiel al espíritu del libro darle a Liesel el libro vacío para que ella lo llene con sus propias historias. Otra cosa es que, a la peculiar narradora de la historia, que ha sido un acierto mantener, sin duda (pero no revele de nuevo su identidad, para que sorprendáis) le han puesto una voz de hombre. Yo siempre la imaginé susurrando a media voz con una suave voz femenina, me hubiera pegado más, pero aún así, tampoco me quejo demasiado, puesto que la locución es perfecta. Quizá el estilo de la historia pueda ser un poquito lacrimógeno para algunos, o ñoño para otros, dependiendo del carácter y las emociones de cada uno, supongo, pero para mí, esta bien equilibrado.
En cuanto a lo demás, es sin duda, y para empezar, una brillante adaptación del libro. Se han hecho cambios con sentido, como ya he dicho, y no rompen la esencia de la obra original, cosa que es lo que yo busco o espero cuando veo una adaptación de un libro al cine. Se han omitido algunos detalles, pero por lo demás, se trata de un retrato fiel de la novela. A nivel interpretativo, su protagonista, Sophie Nélisee, esta estupenda como Liesel, aunque podría ser tan solo un poquitín más expresiva. Pero su porte y rostro me han sabido transmitir el espíritu de la ladrona de libros, un alma capaz incluso de llamar la atención de la peculiar narradora que se ve cautivada por ella. Geofrry Rush y Emily Watson son Hans y Rosa tal y como me los imaginaba: el con su brocha, su acordeón, y sus ojos de plata, siempre cómplices de la mirada de su hija adoptiva, y ella con sus regañinas y su mal carácter, que esconden el gran corazón que tiene en el fondo. Ben Schnetzer también es tal y como yo imaginaba a Max, incluso con su suave pelo como de pluma, y con esa aparente fragilidad que esconde en realidad una gran fortaleza, fortaleza que creo que bebe de las palabras como la de Liesel. La ambientación y el vestuario de la película están también muy bien cuidados, te transportan a la época con cada detalle. La banda sonora corre a cargo nada menos que del maestro John Williams, así que que se puede decir. A mí me ha sabido convencer, creo que es una cinta muy bien hecha y que capta en todo la esencia del libro. Por cierto, cuando reseñé el libro dije que la fecha de estreno sería en marzo de este año, debí equivocarme. O bien lo miré mal en Internet Movie Database, o bien la web tenía la fecha incorrecta, o no sé si es que la productora adelantó el estreno. Me inclino porque el error fue mío, será que lo miré mal.
Sin duda ninguna, sigo recomendando hasta la saciedad esta hermosa historia, ya sea el libro o la película. Puede que a alguno de vosotros os llegue tanto como a mí, y os haga valorar y comprender el inmenso poder que tienen las palabras. Es un poder que a menudo, en la sociedad de hoy, olvidamos y hasta negamos. Yo personalmente, no sé que haría sin ellas, y si pudiera, como Leisel, robaría tantos libros como me fuera posible, y los leería una y otra vez. Y sobre todo... los compartiría con vosotros, dando aquí mi opinión sobre ellos, por ejemplo. Espero que muchos os animéis a leer esta preciosa historia, o a verla en el cine mientras aún dure. Seguro que os encantará.