La leche de vaca, no tiene que ser un alimento necesario para el ser humano.
Con la edad la capacidad digestiva y metabólica disminuye y la leche deja de ser un alimento saludable.
Los lácteos, constituyen una fuente muy importante de toxinas, producida por el organismo debido al tipo y cantidad de proteínas que contienen.
Si tomamos demasiada leche de vaca tendremos exceso de proteínas y calcio, que el cuerpo tiene que eliminar con un trabajo extra.
Los órganos de eliminación como riñones, hígado, intestinos y pulmones se saturan de toxinas, pierden su efectividad y el cuerpo se ve obligado a buscar otra salida, generalmente a través de la piel y las mucosas.
La materia que no puede salir genera un moco, que es un medio ideal para el desarrollo de bacterias.
Las proteínas de la leche de vaca son un 82 % caseinas y 18 % lacto albumina.
Los azúcares son lactosa y la mayor parte de las grasas son saturadas ,mientras que en la leche humana la mayor parte de grasas son ácidos grasos poliinsaturados.
La cantidad de proteínas de la leche humana es 3 - 4 veces menor que la de vaca y ademas son de diferente composición.
La cantidad excesiva de casienas en leche de vaca neutraliza la acidez gástrica favoreciendo las infecciones gástricas. Ademas se coagula en grumos que no pueden ser bien digeridos.
Por otro lado la leche de vaca contiene casi 4 veces mas calcio que leche humana, el equilibrio entre calcio- fósforo en la leche humana es de 2,35:1 y en la vaca de 1,27 : 1, es importante que en el hueso haya un equilibrio entre estos dos minerales.
La leche humana solo tiene 15 mg de sodio / 100 g frente a los 48 mg de la de vaca
La diferencia mas grande entre la leche de vaca y la humana son las hormonas.
Las proteínas de la leche de vaca son estables en el estomago durante 60 minutos mientras que las de la materna permanecen 15 minutos.Las proteínas extrañas entran en el intestino delgado intactas, produciendo sensibilización prematura que puede causar el desarrollo de asma y eccemas.