Lo que está claro, y además antes de escuchar nada de este trabajo, es que el título deja clarito de entrada que en sus adentros nos encontraremos hermosas canciones con un poso de nostalgia y con las que fácilmente el mundo podrá sentirse identificado.
Admito que en cada play a El Año Que Todo Pasó acabo con el corazón en un puño; y que me rindo postrado de rodillas ante canciones como Que Siguiera Bailando, en el que veo huellas de Iván Ferreiro y sobre todo de Quique Gónzalez, en la que incluso se cita una ciudad del viento en la misma.
Exquisiteces pop como Buscando La Canción Perfecta; Novocaina Para Los Suicidas, con la que no he podido evitar pensar en el clásico de Eels por culpa del título, que inmediatamente acabas visualizando como si se tratara de un film de los Cohen y que va vestida de un sonido fronterizo y taciturno perfecta para su lírica.
Maravillosamente hermosa y con unas gotas de positivismo implícito a pesar de los pesares, Con La Punta De Los Dedos se me antoja como la presentación perfecta de este disco, el que se nota desde la primera nota que está hecho con mucho cariño, dedicación y sobre todo muchas esperanzas en él depositadas, lo que le otorga ese plus de sinceridad tan difícil de encontrar en demasiados casos. Si sois listos, espero que no perdáis la pista a estos barceloneses...estoy seguro de no equivocarme de que van a dar mucho que hablar y escribir.