La libertad de expresión

Publicado el 22 octubre 2013 por Romanas

 Aborrezco profundamente todo lo que usted está diciendo pero estoy dispuesto a dar mi vida para que pueda seguir haciéndolo, una traducción libérrima de lo que dijo Voltaire. A lo peor, mañana ya no estoy aquí, en mi casa, porque un tipo de NNGG del PP me ha despenado o los esbirros de ese opusdeísta que ahora dirige la policía española me han metido en la puta cárcel. Porque lo que voy a hacer está penado por esas leyes, enaltecimiento del terrorismo. Pero ¿es enaltecimiento del terrorismo decir que Eta, al principio, tenía razón y que cuando hizo volar por los aires a Carrero Blanco, el mundo entero dio un suspiro de alivio porque uno de los hombre más ominosos del mundo había pasado a mejor vida, desapareciendo con él, la posibilidad de que aquellos horrorosos años de piedra continuaran oprimiendo a un pueblo cuyo único delito era el de ser, como ahora mismo sigue siendo, un pueblo de analfabetos ignorantes? ¿En qué momento Eta dejó de tener razón? ¿Cuando colocó aquella infame bomba en Hipercor? ¿Cuando sus objetivos dejaron de ser esencialmente militares? Ahora, tímidamente, en unas circunstancias semejantes a las del franquismo, una serie de artefactos caseros han comenzado a explosionar por distintos puntos de la geografía española. Esto ¿es justificar dichos antentados incipientes? ¿O, simplemente, es decir que la situación del país es ya absolutamente insostenible y si sólo se producen esos irrisorios atentados de artesanía es porque la larga noche de piedra del franquismo ha hecho que los españoles nos hayamos habituado a la opresión como la forma normal de vida? Yo terminaba ayer o antesdeayer mi post diciendo, parafraseando a Cicerón, en sus célebras catilinarias que “¿ubinam gentium sumus, in qua urbe vivimus?”, ¿qué clase de gentuza somos y en qué mierda de país vivimos?, cuando ya el gobierno hace todo lo posible para que no se sepa el número de suicidios cotidianos y para que los desahucios sean reprimidos con toda la dureza del mundo entre las risotadas de los cipayos..... Que España entera no sea ya un país en llamas es algo que yo nunca lograré explicarme porque no tiene ninguna clase de explicación, que 12 millones de ciudadanos se estén muriendo de hambre entre las risotadas de Botín y Montoro.