La realidad de quien sufre les importa un bledo a la oligarquía corrupta que dirige nuestro país, lo que les molesta es que se diga la verdad, por lo que intentan como sea criminalizar la protesta ciudadana, criminalizándola, convirtiendo a quienes protestan en la calle pacíficamente, en presos políticos. No soportan la libertad, no creen en la democracia. Quieren que sintamos miedo, pero el único miedo que debemos sentir es el miedo a sentirlo. Ningún Estado puede llamarse democrático si se coarta la LIBERTAD DE EXPRESIÓN, por mucho que a sus gobernantes les pueda molestar el sacar a la luz de manera clara esa realidad que tanto les molesta.
Controlan la calle, las redes sociales, buscan hasta debajo de las piedras cualquier crítica y el modo de acallarla. Encarcelan a personas por no importarles un ajuste de cuentas entre sus gentes, les duelen y homenajean a las víctimas del terrorismo solo si les son afines ideológicamente, el nuevo rey ya ha recibido a una parte de las víctimas del terrorismo, las otras víctimas del terrorismo todavía están esperando en la cunetas y en fosas comunes. Caso llamativo esta semana en el Congreso de los Diputados, homenaje a las víctimas del terrorismo, a una parte de las mismas, no solo han ignorado y despreciado a las víctimas del terrorismo franquista, también a las víctimas del 11-M, algo realmente vergonzoso e indignante.
El fenómeno Podemos les ha descolocado, tienen miedo a la unión de la Izquierda y el terrorismo mediático, se han lanzado a degüello contra su líder y contra la izquierda en general, Podemos, pero sobre todo contra su líder, con mentiras falsedades e intentos de manipulación bestiales.
Está claro que molesta Podemos, molesta Izquierda Unida, tienen miedo a la unión de la izquierda, tienen miedo a la República, tienen miedo a la libertad de expresión, la cual en este corrupto reino, es una libertad "simulada y en diferido". Utilizan cualquier excusa para callarnos, un comentario, una foto…
Buscan que sintamos miedo, lo tenemos, pero no a sus acciones, sino a tener miedo, no seremos nosotros mismos quien ejerzamos de censores dictatoriales sobre nuestra libertad. Si cierran páginas republicanas o las bloquean debemos decirles que la República tiene muchos frentes desde donde luchar por ella y defenderla y en todos ellos estaremos.
Nos tienen miedo porque usamos argumentos y tenemos la razón, pero ellos tienen la sartén por el mango y actúan como dictaduras cuyos juicios son inapelables.