Número de páginas: 464
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Sinopsis: Tras dos años intercambiando cartas y pasión por los libros, Sara decide viajar a un pueblecito de Iowa para conocer a su anciana amiga Amy, pero cuando llega, ésta ha muerto, dejando una vieja casona y miles de libros.
Sola en este alejado rincón, se da cuenta de que gracias a las cartas de Amy conoce bien a los habitantes del pueblo. Así, cuando se embarca en la locura de montar una original librería con los ejemplares de Amy se da cuenta de que hay un libro destinado a cambiar la vida de cada uno de ellos. Pero al hacerlo también cambiará la suya.
Opinión personal: De este libro me llamó la atención enseguida dos cosas, en las que creo que coincido con otros blogs que he leído hablando sobre él: el título, llamativo y poderoso por si solo, y la temática "libros dentro de un libro". No soy la única a la que un libro que trata sobre libros le llama doblemente la atención; me pasó con La ladrona de libros, también con La vida cuando era nuestra, y antes de todo eso con La sombra del viento. Y ahora le ha tocado a éste.
Quizás empecé con mal pie con este libro, y es que, al no leer la sinopsis, sino irme directamente a sus páginas hubo un detalle que me resultó de lo más confuso. Si habéis leído la descripción que la propia editorial ofrece, lo primero que habréis visto es que Amy, la amiga de Sara, es anciana ya. Ese dato no lo conocía yo, por lo que me pasé bastantes capítulos pensando que sería una treintañera como Sara, por lo que muchas cosas no terminaban de encajarme. Aún así no es más que algo anecdótico que cuento por mi despiste, y no me ha impedido disfrutar de su lectura.
La historia comienza con Amy, una chica joven, prototipo de ratón de biblioteca, que lleva años viviendo entre libros: trabaja desde hace años en una librería, y cuando termina su jornada, se vuelve a rodear de libros, que son sus únicos amigos. Y es buscando un libro como conoce a Amy y después de dos años intercambiando cartas y libros, Amy invita a Sara a pasar un tiempo en su casa y así poder conocerse. Cuando a Sara la despiden porque cierran su librería, se encuentra sin rumbo ni objetivos en la vida por lo que decide hacer las maletas y dejar Haninge (Suecia) para irrumpir en Broken Wheel, Iowa. La mayor sorpresa llega cuando, al llegar a casa de Amy, se encuentra con su funeral y todo el pueblo parece estar de acuerdo en lo mismo: Amy la invitó, por lo tanto puede estar a Broken Wheel viviendo en casa de la anciana. A través de las cartas que se han intercambiado, Sara ha llegado a conocer a los habitantes de este pueblo, donde aparentemente nunca pasa nada, y conociéndolos, llegará a saber mejor quién era Amy y quién es ella misma.
Es un libro que se lee realmente fácil, y a pesar de ser bastante extenso, se hace una lectura ligera. La novela está basada en sus personajes, y es en ellos en quienes se sustenta y de quienes se alimenta. Conoceremos principalmente a Amy, inadaptada por naturaleza que confía más en los libros que en las personas, y de manera más residual al resto de habitantes. La verdad es que, aunque la lectura me ha resultado agradable, no deja de ser un libro bastante previsible y los personajes están estereotipado de más: Sara es la típica nerd que no conoce más allá de las páginas de un libro, Caroline la devota que vive por y para la comunidad, Grace es esa mujer que pertenece a la Asociación Nacional del Rifle que en tantas películas hemos oído mencionar... Pero aún así hay que reconocerle que, aunque el final sea algo previsible, hasta llegar a él hay varios giros originales que te mantienen atenta a la lectura y que te hacen pasar un buen rato.
Y me despido con una reflexión de la propia Sara:
Los libros son fantásticos, y seguro que están en el sitio idóneo si los pones en una cabaña en el bosque pero, ¿cuál es la gracia de leer un libro fantástico si no puedes recomendárselo a otras personas y comentarlo y citarlo constantemente?Y tal y cómo se despide la autora en su propio libro, "felices lecturas venideras".
Valoración personal: 7,5/10