El uso de la imagen de la Luna, vista a través de una ventana abierta como símbolo de los sueños de futuro, me llamó la atención en la película de 1933 Amores en Hollywood (Going Hollywood), dirigida por Raoul Walsh.
En este olvidado film podemos ver a Marion Davis, actriz rubia platino, amante que fue de William Randolph “Citizen Kane” Hearst, acompañada por Bing Crosby.