Este colorido paisaje celeste abarca unas tres lunas llenas (1,5 grados) sobre los campos de estrellas que hay a lo largo del plano de la Vía Láctea, en la constelación septentrional Cefeo. En la parte superior derecha y en el límite de una enorme nube molecular, a unos 2.400 años luz de distancia, está la brillante región de emisión rojiza Sharpless (Sh) 155, también conocida como la nebulosa de la Cueva.
Con unos 10 años luz de diámetro, los bordes brillantes de esta cueva de gas se ionizan debido a la luz ultravioleta procedente de estrellas jóvenes y calientes. En este lienzo interestelar cortado por densas nubes de polvo también hay varias nebulosas de reflexión azules. Abajo a la Izquierda está el largo núcleo de la nebulosa Lynds Dark (LDN) 1210.
Las exploraciones astronómicas han revelado otros signos de formación de estrellas como la mancha de color rojo brillante de Herbig-Haro (HH) 168, justo a la izquierda de la brillante nebulosa de la Cueva. La emisión de este objeto Herbig-Haro está generada por los chorros energéticos procedentes de una estrella recién nacida.
Fotografía OriginalCrédito: Herbert Walter, CEDIC Team