La maldición de Ochate

Por Misteriosdelmal

En ocasiones parece que la tierra no quiera que nadie evite en ella…
Muchas veces los pequeños pueblos esconden grandes misterios, como en el caso de Ochate, un pequeño pueblo situado en el condado de Treviño, a 14 kilómetros de Vitoria.

Hay quienes creen que desde el siglo XIX, cayó una maldición encima del pueblo y de todos los habitantes:
Tres epidemias
En un periodo de 10 años, hubo tres epidemias, que tan sólo afectaron a los habitantes de este pueblo, la primera de viruela, la segunda de tifus y la tercera de cólera.

Misteriosas desapariciones
También desaparecieron tres habitantes sin dejar rastro alguno, uno de ellos era el párroco del pueblo, que desapareció cuando se iba hacía la ermita de Bergondo, los otros dos desaparecidos, uno era un agricultor, que dejó la comida medio hacer y no se llevó nada. Y el otro apareció en el sendero que conduce al pueblo totalmente calcinado.
Ovnis
Un labrador, en 1947 fue el primero en denunciar la presencia de luces extrañas sobre las ruinas de Ochate, este vio un globo blanquecino de aproximadamente dos metros de diámetro.
El 24 de junio de 1981 Prudencio Muguruza vio una gran esfera de color azul que parecía descender en las cercanías, “Sentía un miedo indescriptible, oía a mi alrededor una especie de intensísimo zumbido; sin pensarlo dos veces, como un autentico autómata, saque una foto con mi modesta cámara a aquel increíble fenómeno”.

Encuentros con el más allá
En 1986 un empresario se encontraba en la torre de Ochate y de golpe oyó unas pisadas en forma de circulo a su alrededor, cuando estas cesaron noto como una mano tocaba su hombro.
En Julio de 1987 dos compañías de carros blindados de la base militar de Araca (Vitoria), estuvieron más de cuatro horas perdidas, deambulando a 300 metros una de la otra, pese a estar tan cerca no podían verse debido a una espesa niebla que caía encima de Ochate.
Los transmisores no funcionaban, tan solo se oían interferencias, a causa de la falta de comunicación, el sargento de una de las compañías que conocía muy bien la zona, decidió ir a buscar la otra compañía, pero de repente se sintió perdido y desorientado en ese pueblo donde había estado tantas veces, así que decidió volver a la base.
La otra compañía también decidió volver a la base al poco tiempo.
En ese mismo año, un grupo de investigadores decidieron ir a Ochate a investigar realmente que ocurría en ese sitio, cuando ya tenían todos los equipos preparados y se dirigían a los coches, encontraron a uno de ellos muerto. Meses después, los mismos investigadores finalmente fueron a Ochate, cuando llegaron oyeron a alguien lamentarse y movidos por la curiosidad, se asomaron a una puerta y vieron una sombra parecida a una figura humana, con barba y nariz aguileña, como la que tenía el investigador muerto meses atrás.
Hay muchas más “leyendas” que citan a Ochate como el punto de mira, pero quién sabe si realmente tan solo son leyendas o de verdad ocurrieron…