Empezamos con una habitual de las listas de peor vestidas: Kim Kardashian. Nuestra Kim se presentó allí con un body hiperescotado (creo que no ha entendido bien aquello de menos es más y pensó que menos ropa es más glamour) y una malla transparentosa a modo de falda.
Kim, querida… tienes un cuerpazo y está bien que lo quieras lucir pero ¿es necesario tanto? Un buen escote, pero que tape un poco más, y una falda que deje algo a la imaginación no estarían mal.Seguimos con Cara Delevigne, que repite en esta sección. Si hace unas semanas la veíamos tapada hasta arriba con un mono pizzeroy esta vez pensó que mejor ir en bragas (ya sabéis lo que dicen: hagas lo que hagas, ponte bragas), aunque tuvo el detalle de tapar el resto de su cuerpo con ¿una mantilla de madrina? Ojo al detalle: Cara, que es más moderna que el último lanzamiento de Apple, va a poner de moda llevar un alfiler en la boca, lo que viene siendo una versión del palillo de toda la vida.
Pero eso no es todo. Al parecer Cara decidió beberse hasta el agua de los floreros durante la fiesta y ni el alfiler en la boca le libró de cogerse una buena cogorza y acabar, literalmente, por los suelos.
Continuamos el repaso con Jessie J, que al parecer se levantó tarde de la siesta y no tenía tiempo de vestirse así que nada mejor que ponerle un par de imperdibles a la sábana de satén verde para salir del paso.
La actriz Natalie Dormer optó por el amarillo piolín en este vestido nada favorecedor y con un escote que le queda mal no, lo siguiente…
Pero ojo, que los chicos también la cagan con sus elecciones en la alfombra roja, y para muestra el estilismo escogido por Pharrell Williams que, fiel a su estilo, se plantó lo primero que encontró en el armario (o en el cubo de la ropa sucia) y su indescriptible sombrero. Me da la sensación de que Pharrell tiene el mismo estilista que Dani Alves
Y hasta aquí la mamarrachada “especial GQ” de la semana. ¿Qué os parecen los looks escogidos? ¿dais el aprobado a alguno?