La manifestación contra la guerra de Vietnam y el intento de levitar mentalmente el Pentágono

Publicado el 24 enero 2018 por Tdi @RLIBlog


El sábado 21 de octubre de 1967, entre 70000 y 100000 personas, la mayoría de edad universitaria, se reunieron en Washington D.C. para "enfrentarse a los artífices de la guerra". Era la primera de las demostraciones bi-anuales contra la guerra que combinaba la protesta con la extravagancia de la contra-cultura y llevaba la desobediencia civil a nuevos niveles de confrontación. Esta se convertiría en un modelo para las demostraciones del Partido Demócrata en Chicago el año siguiente.
Fue organizado por el Mobe (Comité de Movilización Nacional para Terminar la Guerra en Vietnam), una coalición de 150 grupos variados, incluyendo a simpatizantes del Viet Cong, pacifistas, grupos de izquierda y religiosos. Todos tenían el mismo objetivo: acabar con la guerra de Vietnam, en un momento en el que cada mes morían 500 soldados americanos. Para el fin de semana había tanto eventos planeados como improvisados.

El coordinador de Mobe y pacifista radical David Dellinger le pidió a Jerry Rubin, que dirigiera el proyecto de la marcha. Rubin ya había organizado la charla del Día de Viet Nam en Berkeley el 21-22 de mayo de 1965, entre otras acciones contra la guerra en la costa oeste. Su objetivo era el Pentágono, aunque la protesta se situara en más lugares. Por ejemplo, la mayoría de los manifestantes negros se situaban en el grupo de la Universidad Howard, a unas millas.


Mientras se acercaba la fecha, el presidente Lyndon B. Johnson consultó ampliamente al fiscal general Ramsey Clark sobre la posibilidad de disturbios civiles, considerando rodear la Casa Blanca con militares. Finalmente, dispuso de 3000 tropas, la mayoría policía militar, y 1800 guardias nacionales en torno al Pentágono. Norman Mailer, presente en las manifestaciones, escribiría sobre estas en Los soldados de la noche, recibiendo posteriormente el premio Pulitzer.

Casualmente, el día previo a la manifestación había llegado al Departamento de Justicia la Antorcha de la Paz desde Hiroshima, donde había sido encendida, y llevada el 27 de agosto a San Francisco, continuando su camino hasta la capital, donde el asistente el fiscal general Edwin L. Weisl, Jr. se negó inicialmente a aceptarla.


El día de la demostración, la mayor concentración se produjo junto al Monumento a Lincoln, donde la gente oyó los discursos antes de ser llevados a través del río Potomac al Pentágono, donde Rubin insistía que el Departamento de Defensa ejercía su verdadero poder. 50000 personas cruzaron por el puente conmemorativo de Arlington, llegando al aparcamiento del Pentágono en hora y media. Allí se encontraron con la 82ª División Aerotransportada, aunque las demostraciones fueron pacíficas, con canciones, eslóganes y banderas. En ese momento ocurrió el famoso momento de Super Joel, colocando flores en el cañón de los soldados. Sin embargo, la tensión fue creciendo con insultos y lanzamientos de piedras a las ventanas. Algunos cruzaron las líneas de soldados y entraron en el edificio, siendo detenido por los guardias del Pentágono.

En contraste, Abbie Hoffman, cofunfador del Partido Internacional de la Juventud o los yippies, como eran más conocidos, inentó hacer levitar el Pentágono y volverlo naranja mientras Allen Ginsberg, entonaba cantos tibetanos. Desgraciadamente, para levantar objetos con la mente, no basta con intentarlo.

Al amanecer, la multitud se dirigió a la Casa Blanca a despertar al presidente con cantos. Al pasar el permiso de 48 horas, comenzaron a arrestar a los manifestantes, encarcelándose a 680 y hospitalizando a 50. Las manifestaciones se repitieron en seis países europeos, Israel, Australia, Japón. También se hicieron a menor escala en otras ciudades estadounidenses.

Fuentes:

¿Cansado de esperar nuevas entradas?