El Día de Valladolid - Óscar Fraile - 29 Mayo
Francmasones de toda España celebrarán un encuentro el próximo sábado en un céntrico hotel de Valladolid. Se trata de la asamblea anual de la Gran Logia Simbólica Española, que cada año se celebra en una ciudad española diferente y que en esta ocasión tendrá como anfitriones a los hermanos de la Logia Indivisible número 51 de Valladolid, una organización en la que están integradas «entre 20 y 25 personas». A esta asamblea también acudirán delegaciones de otras partes del mundo.
El principal motivo de este encuentro, al que acudirán unos 120 diputados (que es como se conoce a los representantes de cada logia), es el cambio de poder que se producirá al frente de la Gran Logia Simbólica Española. El actual Gran Maestro, Jordi Farrerons, que lleva dos mandatos de tres años cada uno como máximo representantes de este organismo, dejará paso a Nieves Bayo al frente de esta Obediencia Masónica. Bayo se convertirá en presidenta después de obtener más votos que la otra candidatura que se presentó.
Farrerons explicó ayer a este periódico que en España hay unas 4.000 personas que practican la Masonería y que están divididas en logias masculinas, femeninas y mixtas. Pero, ¿qué es exactamente la Masonería? Según el actual Gran Maestro, «es un método de crecimiento personal que ayuda al individuo a conocerse y sirve para potenciar los aspectos positivos y pulir los negativos».
Estos grupos se basan en tres principios: libertad, igualdad y fraternidad, y en torno a ellos celebran reuniones periódicas allí donde están presentes. «Uno de nuestros principios es el respeto máximo a las personas, por eso no pueden entrar en las logias individuos que pertenezcan, por ejemplo, a organizaciones xenófobas», explica Farrerons.
En estas reuniones está prohibido hablar de política o de religión, puesto que pertenecen al ámbito privado de cada persona. Según el Gran Maestro, que dejará de serlo el próximo sábado, la Logia Indivisible número 51 es la única que existe en Valladolid y cuenta con entre 20 y 25 miembros. «No somos grandes grupos porque en los tiempos que corren es muy complicado promulgar principios que se basen en la libertad, igualdad y fraternidad».
Fuente: El Día de Valladolid