La matanza de Lemberg o los crímenes soviéticos contra la humanidad: 05/07/1941

Por Lupulox

Camaradas,
El mundo entero se sobrecoge ante el horror de los crímenes soviéticos que el avance de la Wehrmacht está revelando. Apenas nos hemos sobrepuesto de los despiadados actos criminales perpetrados por los bolcheviques contra prisioneros de guerra inocentes en Broniki, que ahora nos vemos obligados a hablar de una nueva masacre, esta vez contra la población civil de Ucrania.
El avance de la Wehrmacht a través de Ucrania, la liberación de L'vov y el descubrimiento de la masacre de Lemberg.
El pasado 30 de junio, cuando las tropas alemanas entraron en L’vov, en el interior de la prisión de Lemberg se descubrieron los primeros cadáveres. Era sólo el comienzo de un espeluznante descubrimiento del que tan sólo hoy, cinco días después, hemos sabido su verdadero alcance.
La prisión de la GPU de Lemberg, sede del terror bolchevique.
En el interior de la prisión y el orfanato de Lemberg, han sido descubiertos un total de 4.000 cadáveres terriblemente mutilados. La mayoría de las víctimas son ucranianas, aunque también hay varias polacas y según algunos testigos, dos pilotos de la Luftwaffe se encuentran también entre los asesinados. Todos ellos cayeron prisioneros de la infame NKVD y a sus manos padecieron una muerte atroz bajo indecibles tormentos y torturas. Entre los cadáveres mutilados hay niños pequeños y niñas y mujeres entre 8 y 22 años.
Los agentes de la GPU han masacrado a un sinfín de nacionalistas ucranianos justo antes de abandonar la ciudad.  Miles de hombres y mujeres inocentes han caído víctimas del baño de sangre.  Aquí tuvieron lugar los brutales y crueles crímenes.  Los bolcheviques prendieron fuego a las pruebas de sus crímenes indescriptibles perpetrados en la prisión, que ha sido capturada por las tropas alemanas.  Las víctimas de estos asesinatos bestiales han sido arrastradas al exterior para ser identificadas.  Hombrse y mujeres, niños y ancianos, nadie ha escapado de este ejemplo de inhumanidad.  Con cuchillos, hachas, granadas de mano y metralletas han aniquilado y martirizado los asesinos bolcheviques a estas inocentes víctimas.
Se ha tardado cuatro días en extraer todos los cadáveres del sótano del edificio. Los trabajadores han tenido que llevar a cabo su tarea con máscaras de gas por los nauseabundos olores de la putrefacción. Las mutilaciones han incluido miembros cercenados. Una mujer ha sido encontrada con uno de sus pechos rebanado con un cuchillo y una mujer embarazada con el vientre desgarrado para extraer de sus entrañas el bebé nonato. Algunas de las víctimas han sido enterradas vivas.
Un grupo de habitantes de Lemberg busca a sus familiares en una pila de cadáveres dejada por los comisarios políticos comunistas.
En el interior del orfanato el espectáculo ha sido no menos dantesco, y se han descubierto 30 niños muertos y torturados, con sus cadáveres colgando de los toalleros.
La prensa internacional no ha tardado en hacerse eco de la nueva atrocidad bolchevique:
Cuando los rusos soviéticos ya no podían mantener sus posiciones en Lemberg, L’vov, la NKVD, justo antes de su huida, ha llevado a cabo una terrible masacre sobre prisioneros inocentes. De acuerdo con los informes de corresponsales de guerra neutrales, esta masacre es una de las masacres más terribles y despiadadas de las que jamás se ha tenido noticia en la historia del mundo. En la prisión de la policía 20 prisioneros fueron hacinados en el interior de cada una de las celdas más pequeñas; entonces, a través de las ventanillas, fueron ejecutados. Entre 2.000 y 2.500 personas fueron asesinadas de esta manera.Die Tat, periódico suizo.
La tragedia: cadáveres de ciudadanos inocentes amontonados a millares.

Antes de su retirada, los rusos dieron rienda suelta a su odio por una última vez y llevaron a cabo asesinatos en masa con una brutalidad inhumana en muchas de las prisiones. Poco antes de retirarse, prendieron fuego a la prisión Brigidky. En los sótanos los comunistas apilaron los cadáveres de los asesinados como montones de leña. Sobre cada capa de cadáveres esparcieron tanta arena que se podía caminar sobre ella, y a continuación tendieron otra capa de cadáveres. No pude encontrar ni un superviviente entre los prisioneros.Diario Tidningen de Estocolmo.
He aquí a los amigos de Winston Churchill. Desconocemos si los tribunales controlados por plutócratas, masones y judíos llegarán a juzgar estos crímenes –mucho nos tememos que no-. Sin embargo, culpables o no en la tierra, han de saber que la justicia divina ya ha decretado su veredicto: ¡el comunismo es culpable!
Es lebe Nationalsozialismus!Tod dem Bolschewismus!