Está de regreso el proyecto iniciado por Trimadre a los treintallamado "La maternidad de la A a la Z". Semanalmente distintos Blogs se suman a la causa de elegir una palabra para ser añadida a esta suerte de Diccionario; ésta palabra debe estar relacionada con la experiencia paternal, puede describir un sentimiento o una faceta de su personalidad que se desconocía antes de ser padre.
Para esta tercera entrega elegí: GUERRA - Lucha armada entre dos o más naciones o entre bandos de una misma nación. (Real Academia de la Lengua - RAE).Ayer uno de mis gemelos me preguntó si estábamos en GUERRA. Su hermano de inmediato afirmó que si. Yo me encontraba atónita! Pregunté que de donde habían sacado esa idea, y se dio la siguiente conversación:
SAMU - "En la primera página del periódico hay imágenes de naves de combate"
ARI - "Y dice que la Guerra ya va a empezar"
SAMU- "Estamos en Guerra con Chile, verdad?" (Él recordó la clase de historia)
Yo - "No!" (respiré profundamente) "No estamos en Guerra con nadie"
ARI - "Pero el periódico dice que..." (Inmediatamente lo interrumpí)
Yo - "Amor, no vamos a estar en ninguna Guerra"
Yo me quedé meditando sobre mi respuesta. Actualmente en las noticias se escucha que si en #Syria hay guerra, que si tal país apoyará una intervención militar, que si una autoridad religiosa pide calma. Y claro mis hijos están tan expuestos a estas noticias, que su imaginación vuela al infinito y más allá.
¿Será que la historia se repite? De niña Yo vivía en la capital - Lima. Las historias de atentados en el interior del país eran tomadas muy a la ligera. Era una época donde sabíamos lo que era el terrorismo por los periódicos y las emisoras radiales locales. Yo lo sentía tan lejano.
Cuando Yo tenía la edad de mis hijos. Un atentado en el centro del distrito comercial de mi ciudad fue el inicio de ataques que duraron una semana. Causaron un total de 40 muertos. Nadie se atrevía a salir de noche, los locales cerraban temprano. Era una necesidad saber donde estaban cada miembro de tu familia.
Mis hijos están siendo expuestos a estas noticias, preguntándose si están a salvo en casa. Yo recuerdo mi niñez con signos de violencia en las calles y a mis padres negando una obvia situación crítica interna gracias a los Grupos Terroristas. ¿Estoy haciendo lo mismo ahora? ¿Podemos aislar a nuestros niños de la ansiedad y el horror de la palabra GUERRA.
No me queda más que esperar que las señales de alerta no sigan su curso. Tratar de proteger a mis pollitos bajo el ala protectora de esta mamá gallina. Es una reflexión que hago y traslado a todos aquellos que miran con atención y curiosidad lo que ocurre en otras latitudes. Ya lo dije en un post anterior cuando recordaba el Atentado de Tarata y la época de Terrorismo en la década del 80´s en Perú:
"Nunca debemos olvidar las
señales de alerta. Mis hijos deben entender que existen peligros y deben estar pendientes de cualquier signo de resurgimiento."
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