Estamos en la Semana Mundial del Parto Respetado, y me parece un buen momento para sacar a la luz un escrito de una matrona, figura fundamental cuando de nacimientos se habla. Os invito a leer este texto escrito por Sara Cañamero, matrona, enfermera pediátrica y mamá de dos niños.
Aunque cada vez hay más mujeres que consideran el parto en casa como una opción segura y deseable, la mayoría de las mujeres en España aun siguen sintiéndose más seguras dando a luz a sus hijos en un medio hospitalario. Sin embargo no quieren renuncias a tener partos no intervenidos, respetados y humanos. Ellas sueñan con un parto bonito, íntimo, único, con epidural... o sin ella.
Está demostrado que las mujeres que cuentan con un soporte emocional continuo y profesional experimentan su parto de manera más confiada y con menos intervenciones, logrando en mayor porcentaje un parto natural. Lo que además de facilitarles todas las etapas de la maternidad, les brinda un sentimiento mayor de logro y empoderamiento que hace del nacimiento de sus hijos la mejor experiencias de sus vidas.
Existen estudios como el realizado por la prestigiosa Cochrane Collaboration llamado "Apoyo continuo proporcionado a las mujeres durante el parto" del cuál pueden extraerse interesantes conclusiones. Aquellas mujeres que reciben un acompañamiento continuo durante el parto presentan:
* Menor necesidad de uso de analgesia de cualquier tipo.
* Menor índice de cesáreas.
* Menor índice de partos instrumentales (fórceps, ventosa, espátulas).
* Mayor satisfacción con su experiencia de parto.
Los autores llegaron a la conclusión de que todas las mujeres deberían recibir apoyo para el parto y el nacimiento.
El acompañamiento domiciliario profesional por parte de las matronas es una opción, el vacío que hasta ahora estaba sin cubrir. La matrona está disponible para las parejas antes del parto y así despejar dudas, temores, inquietudes. Durante el parto es capaz de quedarse en segundo plano, dando el protagonismo a los futuros padres pero velando para que la fisiología siga su curso. Controlando el bienestar fetal y el bienestar de la madre interviniendo lo estrictamente necesario.
Además la matrona puede ofrecer recursos alternativos a la anestesia epidural para el manejo del dolor (agua, masajes, punción en el rombo de michaelis, posturas,....) y así facilitar el encajamiento del bebé.
En el acompañamiento la dilatación se puede realizar en casa de la pareja, en sus espacios, con las personas que ellos quieran que les acompañen, donde todo fluye con más naturalidad. La matrona podrá indicarles cuándo es el mejor momento para acudir al hospital, haciendo de esta experiencia algo hermoso, natural y poco traumático.
Sara Cañamero
Maternatal