La presencia cotidiana de la matemática en la vida material se pone de manifiesto en el contar y medir. La propia Biblia con su todo tiene número, peso y medida expresa esa constante necesidad.
El Museo Alemán de la Ciencia y la Técnica dedica un buen espacio a la medida, tanto del tiempo como del espacio.
Mostramos arriba unas clepsidras egipcias. Los relojes de agua estuvieron muy presentes en distintas civilizaciones, tanto en Oriente como en Occidente. Además el agua se prestaba a otros movimientos que diversificaban la simple medida del tiempo. El mítico artificio de Azarquiel (siglo XI) en Toledo es una muestra de las enormes posibilidades de los dispositivos hidráulicos.
Quizá lo más atractivo sea la colección de relojes solares renacentistas, que muestra tanto el virtuosismo técnico como los conocimientos astronómicos.
Hay múltiples vitrinas con instrumentos de medida. Nos limitaremos a exponer el juego de patrones de capacidad (1716) que conserva su estante original.