Seguridad, qué bonito nombre tienes.
Me pregunta un colega que cómo invertir 30.000 €. Sin riesgo, que lleva muchos años para juntarlo.
Seguridad. El hogar de los pobres. ¿Te lo habías planteado?
Ríete de la repetición del email email diario. Precariedad y estrés como sinónimos de inadmisible. Nómina y contrato fijo como confort.
¿Cuántas fortunas existen creadas sobre la certeza? Pregunto.
Inversiones seguras, clientes que podrían ofenderse y que no va con tu marca.
Que empiezas mañana. Que tienes que mejorar el producto. Que primero hay que acabar la web.
Eufemismos de que eres clase baja y quieres permanecer ahí. Tumbadito.
Probe y esclavo. Esclavito
¿Muy nazi?
Soy consciente de que hago mal juzgando así, por eso voy a cambiar.
A partir de ahora celebraré la diversidad, diré aquello de «tiene que haber de todo» y tranqui, que yo invito a la cena.
Porque hace tiempo que los cobardes mataron el riesgo y eso es de agradecer.
Porque cuando nadie se atreve el éxito pasa de improbable a inevitable.
Porque cuando todos se quedan en casa por si pierden presentarte te garantiza podio.
En el newsletter enseño 3 formas de crear titulares. Entiéndeme, titulares, título, asuntos, primeras líneas.
Palabras que llenan salas.
Palabras que abren puertas y cierran reuniones.
Palabras que consiguen solicitudes de presupuesto.
Palabras con tasas de apertura escandalosas. Que provocan ganas de abrir la puerta y se graban en el hipocampo como el hierro al rojo vivo en el muslo del ganado, humeantes.
Palabras que un cobarde nunca tolerará. Si lo eres no te apuntes, la lección te frustrará mucho:
Acepto la política de privacidadLa entrada La mejor forma de invertir 30.000 € se publicó primero en Luis Monge Malo.