El grabado Melencolia I (1514) de Alberto Durero se puede incluir entre las obras que ha hecho correr más ríos de tinta y que más se han prestado a la especulación. La riqueza simbólica es de tal magnitud que podemos encontrar en ella múltiples interpretaciones. Pero en lo que todo el mundo está de acuerdo es el papel protagonista que Durero da a la Matemática.
No menos intrigante resulta la Melancolia (1528) de Lucas Cranach (1472-1553) que se encuentra en la Scottish National Gallery. Traspasando la puerta de entrada, a la derecha, podemos sobrecogernos con este tema recurrente: Cranach el Viejo lo utilizó en varias ocasiones y con apreciables cambios. En la Melancolía de Edimburgo aparece el compás que va a caracterizar la alegoría. La esfera perfecta también está en el grabado de Durero.
El animal que representa a Saturno, el planeta de los melancólicos, es el macho cabrío o el ciervo, son animales que sobrevuelan el cielo portando personas. El humor melancólico será el estado de trance inspirado para los ocultistas del Renacimiento.
La Instantánea 24 de DivulgaMAT fue dedicada a las Melancolías matemáticas.