La memoria historica y la «masoneria» en cantabria

El Lunes pasado  (30 de Enero 17) se constató una vez más lo dificultoso de hacer valer en un país como el nuestro, la tan traída y llevada  Memoria Histórica, y con ella  poder sacar a todos aquellos que padecieron escarnio por seguir la fe en la lealtad a la II República,

Ya fueran socialistas, anarquistas, comunistas, o gentes del común, o masones.

Se han tardado 80 largos años,  para que se diera luz de candil a un simple acto como fue poner una sencilla y escueta placa en el edificio de Tabacalera en Santander, y que hoy alberga el Centro de la Memoria Histórica, y el Archivo Histórico Regional.En medio de 12 asociaciones reivindicativas de la memoria histórica ( políticos (PSOE, IU y PCE), sindicatos (UGT, CC OO y CNT) y colectivos (Asociación Archivo Guerra Exilio (AGE), Héroes de la República y de la Libertad y Plataforma Ciudadana III República) que estuvieron presentes en el descubrimiento de la citada placa, hubo una intervención un tanto extraña para la congregatio que allí se reunió.  Hubo una voz distinta, la masonería que representa la GLSE, y por detrás de mí se oía la sorpresa : ¿;Masones¡¡¡  

Foto de familia de las Asociaciones de la Memoria Histórica presentes en el actoPor primera vez se oyó la voz de la «masonería», digamos que para ser justos y solmenes se dejó oír  la voz de una parte de la masonería , en concreto de la Gran Logia Simbólica Española  que por boca  de la Masona,  Marisa Lacalzada  dirigió a los allí congregados,  palabras tranquilas y sosegadas, indicando que la masonería ha formado y forma parte de la sociabilidades progresistas de Cantabria,  y por ello también sufrieron,  pues no en vano los masones corrieron igual suerte que el resto de los represaliados, ser despojados de su dignidad,  y  para colmo se instituyó para infligir más escarnio la Ley de  la Represión del Comunismo y la Masonería.
La logia del Luz del Norte, de la Gran Logia Simbólica Española , debido al empeño de esta impulsiva Aprendiza Masona, se enroló en el reconocimiento de esa memoria histórica en tierras cántabras, esa Memoria que tanto se dice querer revindicar y perseguir, unos y otros pero han pasado 80 años desde aquella barbarie y tras este largo tiempo,  el lunes día 30 de Enero se puso una sencilla placa, modesta y sin términos acusatorios o recriminatorios en el edificio de Tabacalera en Santander que fue prisión central de Cantabria.Y allí nos vimos en el acto masivo,  en el estimo, personalmente, que debiera de haber estado presente  toda logia,  por no decir toda la Obediencia, y su máxima representación , pues por pinera vez se hacía visible una parte de la masonería, que no tuvo empacho de nombrar a la otra “«masonería» citando  la existencia de la logia Semper Fidelis, pero  realmente  haciendo visible a esta masonería liberal, solos dos masones de la GLSE, y yo como  «visitante» externo, masón pero no de la GLSE.En la medida que pudimos dejamos constancia de querer mantener la llama de la masonería dentro de ese vasto campo tan desértico de la memoria histórica, donde se dejan notar  bastantes pocas ganas en echar adelantes por nuestros gobernantes en general  estas cuestiones, aun tan delicadas.En general hubo mucho comedimiento, pues cuando intervinieron algunos miembros socialistas entre el público, tan solo una persona les preguntó desde el patio ¿Donde habían estado durante todos estos años, los socialistas?, frente a las reivindicaciones de los represaliados por recobrar dicha memoria que siempre ha estado sostenida por los grupos de la Memoria Histórica y los Republicanos.Como muy bien expresó el representantes del anarquismo  «esta placa no cierra un periplo de dignificación, sino al contrario tras 80 años en Cantabria debiera se la espita para resignar tanto olvido e indignidad»  pues aún queda mucho por hacer como  poder sacar de las orillas de la carretera, y de las tapias de los cementerios, como el de Ciriego, tanto desaparecido.Hubo entre las entidades participantes, emotivos discursos por revindicar la dignidad de las víctimas del franquismo, en cuyo acto intervinieron el Consejero de Cultura y la Vicepresidenta del Gobierno de Cantabria, que se vieron desbordados por una ingente cantidad de asistentes al acto, viejos y jóvenes, revindicando una memoria, ante cuya existencia se hace difícil no soltar la pluma y de corrido criticar tanta hipocresía que media en el tema por parte de los gobiernos desde el central a los regionales.En dicho acto nos consta que estaban presentes a titulo personal otros «Hermanos» a los cuales hay que alabar y agradecer su presencia, pese a que su  Obediencia, no estuviera allí representada, pues esta poco a fin a actos sociales de esta naturaleza prefiere las campañas de Change.org. o recabar de las Instituciones un cicatero Reconocimiento de la Dignidad de la Masonería,  En fin que cada  «masonería» va por libre, para que luego digan que uno es crítico.Gracias Marisa, Gracias Jaume, por vuestra presencia y por vuestra vocación y persistencia. 
Víctor Guerra