- ¿Y, che?, apuró después, pegándole una palmada a Ricardo en el brazo-. ¿Cómo fue lo del Negro con los trolos?- No -insistió Ricardo- Porque antes caía tupido por acá.- Déjalo, boludo. No le hagas fiestas que por ahí se viene. Contame lo de los trolos..-Venía siempre.-Ya sé, gil. Si yo también venía. ¿O no venía yo?.../...
Roberto el Negro Fontanarossa era sobre todo un extraordinario dibujante, y algunos de los cuentos son tan gráficos que resulta fácil imaginarse la viñeta resultante. Eso es seguramente lo que buscaba y desde luego lo que consigue. Lo tenía claro:
De mi se dirá posiblemente que soy un escritor cómico, a lo sumo. Y será cierto. No me interesa demasiado la definición que se haga de mí. No aspiro al Nobel de Literatura. Yo me doy por muy bien pagado cuando alguien se me acerca y me dice. "Me cagué de risa con tu libro"